Debería empezar a instaurarse la moda de decir, cuando nos preguntan cuántos años tenemos, la edad física y la mental.
Shirley y Hinda (92 y 84 años respectivamente) nos demuestran que esas cifras no corresponden a su edad mental, o sí, porque el activismo no debería entender de edades.
Ellas, además, son las dos protagonistas del documental noruego Two Raging Grannies (Dos abuelas furiosas). No te lo pierdas:
El documental muestra a la perfección la paradoja de la fragilidad física frente a la fuerza de su espíritu de protesta y activismo. Imposible no dejarse inspirar por ellas.
Shirley y Hinda llevan más de 10 años en la organización activista Raging Grannies (las “yayoflautas” estadounidenses) cuya función es concienciar a los ciudadanos norteamericanos sobre cuestiones medioambientales y sobre la paz.
El cineasta noruego Havard Bustnes se cruzó con un video suyo en YouTube y se enteró de que Shirley había sido arrestada 12 veces en el último año por actos de protesta.
El punto de partida es el afán de ambas por estudiar temas financieros y más concretamente las causas de la crisis y las posibles soluciones.
Por María Hidalgo en Muhimu