Existe un fenómeno insólito pero real, que hace recordar a las plagas de Egipto: la lluvia de peces. Este evento se produce cuando un tornado aspira peces, normalmente de ríos, los transporta hasta una nube tormentosa hasta que los peces son descargados junto con grandes lluvias y truenos apocalípticos. Muchos peces no sobreviven al impacto pero la mayoría sí.
Aunque la lluvia de peces es la más conocida se han dado casos de ‘lluvias de ranas’ o, para el horror de muchos de serpientes. Hubo una lluvia de serpientes en Memphis en 1877 y millares de ranas cayeron del cielo en Massachusetts 1953.
La localidad de Yoro en Honduras lleva más de un siglo con lluvias de peces anuales. Según se cuenta la gente está tan acostumbrada que calienta el aceite en las sartenes y salen con baldes cuando llueven los peces.