En el cine nos hemos topado infinidad de veces con artefactos encantados que son la base de los peores relatos de terror, pero no hay que olvidarnos de que el mundo real también está plagado de leyendas sobre objetos hechizados o malditos, que son capaces de traer las peores desgracias a quienes los poseen.
La silla de Thomas Busby
En 1702, Thomas Busby llegó borracho a su casa y encontró a su suegro, Daniel Auty, sentado en su silla favorita y amenazando con llevarse a su hija con él. A Busby solo se le ocurrió agarrar un martillo y golpear a Auty en la cabeza hasta matarlo. El asesino fue juzgado y condenado a la horca, pero hay quien dice que en este proceso, aprovechó para maldecir su silla y a todo aquel que se sentara en ella. De hecho hay una serie de extrañas muertes accidentales unidas por el hecho de que todas las víctimas se han sentado en la silla, la cual, se encuentra ahora en el Museo Thirsk, colgada de una pared para evitar que sea usada.
Diamante de la esperanza
Actualmente, esta joya valuada en 250 millones de dólares se encuentra en el Instituto Smithsoniano. Los que lo han poseído o custodiado se han enfrentado a la tortura, la decapitación, el suicidio y la vergüenza. Algunos dicen que tener esta gema se paga con la vida.
El jarrón de Bassano
Se trata de un jarrón fabricado en plata en el siglo XV y supuestamente otorgado como regalo de bodas a una novia italiana que nunca llegó a casarse, ya que fue asesinada. El mito dice que todo aquel que ha heredado el jarrón, o que lo ha comprado en alguna subasta, termina muerto a corto plazo.
El niño llorando
El pintor italiano, Bruno Amadio, que usaba el nombre de Giovanni Bragolin para firmar sus obras, parecía obsesionado con retratar a niños llorando. Sin embargo, su obra se puso de moda y se llegaron a reproducir varias copias de sus cuadros. A mediados de los 80, sus trabajo fue calificado como “maldito” ya que era común encontrar sus cuadros intactos en viviendas que se habían incendiado. También se decía que estos artefactos eran capaces de “invocar” las llamas.
El número de teléfono 888 888 888
La verdad es que resulta bastante sencillo de recordad, pero si eres dueño de esa línea, tal vez no la conserves por mucho tiempo. Inicialmente, el número perteneció a Vladimir Grashnov, CEO de una compañía búlgara que falleció en 2001 a los 48 años de edad, de un ataque al corazón. Luego pasó a manos del mafioso Konstantin Dimitrov, quien murió en 2003 en un tiroteo. Konstantin Dishliev se convirtió en el nuevo usuario de la línea y apareció baleado, por lo que la compañía telefónica optó por suspender el número.
El espejo de la plantación Myrtles
Data desde 1796 y se encuentra en Lousiana, Estados Unidos, y se dice que la casa está embrujada. Fue construida sobre un cementerio indio y las leyendas aseguran que en su interior se han cometido varios asesinatos. Sara Woodruff y sus dos hijos fueron envenenados aquí, y se cree que este espejo capturó sus almas. Algunos visitantes aseguran que han visto en él huellas que aparecen de manera inexplicable.
La mujer de Lemb
También conocida como la Diosa de la Muerte, esta pequeña estatua de piedra caliza hecha a mano alrededor del año 3500 a.C., ha llevado a la tumba a familias enteras. Fue descubierta en 1878 en Europa del Este y Lord Elphont se convirtió en su primer propietario. En poco tiempo, toda su familia murió. Tras ser vinculada con la muerte de varias familias más, Sir Alan Biverbrook donó la pieza al museo Royal Escocés después de que su esposa y sus dos hijas murieran.
Porsche de James Dean
Este hombre amaba tanto a su auto que le puso el nombre de su mascota “Little Bastard”. Él murió en un accidente automovilístico bastante fuerte. Cuenta la leyenda que después de que George Barris comprara lo que quedaba del auto, éste fue trasladado a su taller y, al bajarlo, las cuerdas que lo sostenían se rompieron y el deportivo cayó sobre un mecánico y le rompió las piernas. Un médico, que compró el motor del coche, murió en un accidente, y un conductor de camión se estrelló y murió durante el transporte del chasis del coche.
Tumba del Rey Tut
Se dice que más de 20 personas que han entrado a la tumba de Tut han muerto en condiciones poco usuales. Algunos dicen que la causa fue un hongo mortal existente dentro de la tumba, pero otros creen que el Rey maldijo a todos los que perturbaron su sueño.
Annabelle
Esta muñeca es real y sirvió de inspiración para las cintas El Conjuro (2013) y Annabelle (2014). Su propietario se encontraba a la muñeca en diferentes posiciones dentro de su casa, y además atacó al compañero de habitación del dueño. Él se deshizo de Annabelle y realizó un exorcismo en su casa, por lo que ahora, este “juguete” se conserva en una urna de cristal en el célebre Museo oculto de Ed y Lorraine Warren.
Fuente: difundir