El aterrador misterio no resuelto del niño encontrado en una caja de cartón y cuya identidad, 60 años después, aún es desconocida

Hace casi 60 años, la policía estadounidense descubrió una caja de cartón que contenía en cadáver de un niño pequeño

El aterrador misterio no resuelto del niño encontrado en una caja de cartón y cuya identidad, 60 años después, aún es desconocida

Autor: Francisco Ide

Hace casi 60 años, la policía estadounidense descubrió una caja de cartón que contenía en cadáver de un niño pequeño. Una autopsia reveló que el niño probablemente fue abusado físicamente, pues estaba cubierto de hematomas y cicatrices. 

 

Seis décadas después, los investigadores de Filadelfia aún no han podido identificar el cuerpo, ni están más cerca de resolver el misterio que conmocionó al mundo. El caso continúa sin resolverse desde 1957, lamentablemente sigue siendo el «Niño desconocido de América».

Se cree que el niño tenía entre cuatro y seis años. Tras la autopsia de determinó que sufría de desnutrición y posiblemente fuera víctima de abuso. Se encontraron cicatrices quirúrgicas en diferentes áreas de su cuerpo, incluído el tobillo y la ingle. Los investigadores estiman que el cabello del muchacho fue cortado después del asesinato, como un intento de ocultar su identidad.

Después de que un transeúnte informara a la policía del espeluznante hallazgo , los agentes fueron a investigar la escena. La joven víctima había sido colocada en una caja, antes de ser arrojada a Susquehanna Road en Fox Chase.

Después de que se tomaron las huellas dactilares del niño, la policía descubrió pruebas relacionadas con gran el caso, incluida la gorra, la bufanda y el pañuelo de un niño. Como el crimen era de naturaleza tan impactante, tuvo gran repercusión en los medios.

Mientras la policía luchaba por encontrar pistas, decidieron lanzar una fotografía postmortem del niño, para ello lo vistieron y ubicaron el cuerpo en posición de estar sentado.

 

Algunos teóricos creen que el crimen tuvo algo que ver con un hogar de acogida, que se encontraba a poco más de un kilómetro de donde se descubrió el cadáver. Uno de los empleados del examinador médico, Remington Bristow, se obsesionó con la resolución del caso. En 1960, contactó a un psíquico en Nueva Jersey, quien le dijo al investigador que buscara una casa que se pareciera a un hogar de acogida. Mientras los oficiales rastreaban la propiedad, vieron una cuna que podría haber cabido en una caja. Bristow también afirmó que las mantas en el hogar temporal se parecían mucho a las envueltas alrededor de la víctima no identificada. A pesar de las especulaciones, la policía no pudo encontrar ningún vínculo sólido con el crimen.

Un misterio sin resolver, sobre el macro asesinato de un inocente niño.

Con información de The Sun

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