El obrero que hizo dedo y el único que paró fue Pepe Mujica

En Uruguay , el obrero Gerhald Acosta hacía dedo en la carretera hacia a la ciudad Colonia del Sacramento (lejos de Montevideo) y, para sorpresa suya, el único auto que se detuvo para recogerlo fue el de José «Pepe» Mujica, quien en ese momento era la máxima autoridad del país

mauriciomorales

16/12/2022 10:00am

En Uruguay , el obrero Gerhald Acosta hacía dedo en la carretera hacia a la ciudad Colonia del Sacramento (lejos de Montevideo) y, para sorpresa suya, el único auto que se detuvo para recogerlo fue el de José «Pepe» Mujica, quien en ese momento era la máxima autoridad del país.

Acosta, que no pudo trabajar ese día de enero de 2015 porque tenía la cédula vencida, narró que luego de unos 25 ó 30 autos que no se detuvieron, una camioneta oficial se detuvo, detrás iba otro móvil del que bajó una persona que le preguntó a dónde iba.

“Le conté lo que me pasó y le dije que iba para Juan Lacaze. Me dijo que me podían llevar hasta Anchorena y que me subiera en la camioneta que estaba adelante. Cuando subí dije a esta mujer yo la conozco. Era Lucía [Topolansky, su mujer] y Pepe [Mujica] venía sentado adelante. No podía creer que el presidente me estaba llevando”, señaló.

“El viaje fue corto, pero ellos fueron muy amables. Al bajar les agradecí muchísimo porque no cualquiera ayuda a alguien en la ruta, y menos un presidente”.

Diálogo con estudiantes en Chile

Pero este no ha sido un episodio aislado de comunicación horizontal del ex mandatario, puesto que es un estilo que lo caracteriza. Mujica visitó Chile durante tres días en noviembre pasado para participar en el Segundo Foro de Derechos Humanos de la AUGM y dialogó con más de 200 estudiantes provenientes de distintas universidades públicas del país, quienes tuvieron la posibilidad de dirigir preguntas al ex mandatario uruguayo.

A las comitivas de la Universidad de Valparaíso y Universidad de Playa Ancha, se sumaron jóvenes provenientes de la Universidad Tecnológica Metropolitana y la Universidad de Santiago de Chile, así como estudiantes secundarios del Instituto Nacional.

Desde la Casa de Bello, los organizadores, en tanto, estuvieron presentes las y los representantes del Consejo de presidentes, congresales FECH y centros de estudiantes de las distintas carreras de la Universidad. Todos y todas participaron del diálogo que consideró la voz protagonista del estamento estudiantil.

«Nos toca vivir un tiempo hoy que no enamora a nadie. Entonces se la agarran con los jóvenes, que no quieren esto y no quieren lo otro, pero nos tocó vivir un tiempo desabrido, que no enamora, que no cultiva la esperanza, ¿y qué somos los humanos sin sueños, sin esperanzas que nos estrujen colectivamente para marchar por las incertidumbres de la vida?», señaló «Pepe» Mujica en su intervención.

A pesar de ello, advirtió que él, «aquel joven fervoroso (que) hoy es un anciano, les viene a decir que no todo está perdido. A pesar de todos los pesares, la vida vale la pena si la vida tiene un contenido que nos dé un objetivo para nuestra milagrosa existencia».

«Se puede vivir por haber nacido y es un fenómeno biólogo, pero la gran pregunta es qué vas a hacer con tu vida. Te la determinan otros, el mercado, o tú tienes algo que ver en el rumbo de tu existencia», planteó el ex Presidente.

Seguidamente, reconoció que «soy de los que piensan que venimos de la nada y vamos a la nada, y que la única aventura es este tiempo de amor, de locura, de injusticia, de caer, de levantarse y de volver a empezar el trille de la vida. Les quiero transmitir que a pesar de todos los pesares, la vida es el valor más esencial de la naturaleza humana».