Las bromas crueles y pesadas nunca faltan en casa.
Quienes tienen hermanos mayores saben que esto puede ser visto como unas de las mayores dichas de la vida, pero también puede ser toda una desgracia, ya que además de ser el integrante más consentido de la familia por ser el menor, también quiere decir que serás la víctima de incontables bromas desagradables durante muchos años.
No importa si son bromas muy pequeñas o de las más pesadas, los hermanos mayores siempre querrán reír a expensas de sus parientes más pequeños, y a continuación les presentamos claro ejemplo de ello. Hace unos días atrás Millicent Phillips debió someterse a una cirugía dental para extraer una de sus muelas del juicio, por lo cual fue puesta bajo una fuerte dosis de anestesia, oportunidad que sus hermanos mayores aprovecharon para jugarle la broma del siglo.
Tras salir bien de su intervención, uno de los hermanos de Millicent procedió a llevarla a casa, no sin antes hacerla creer que estaban viviendo un verdadero apocalipsis zombie, con ayuda de su otro hermano, e incluso con la de su propia madre. En el auto ambos escucharon un extraño anuncio en la radio local que advertía a los habitantes del lugar de un extraño virus que había estado infectando a varias personas, y cuyos síntomas eran, “fiebre alta, nauseas, muerte e incluso canibalismo”.
Por supuesto, la inteligente pero aun drogada Milli sacó sus propias conclusiones, “¿Zombies?”, se dijo a sí misma impactada. Luego ellos se encontraron en casa con otro de sus hermanos, y llenaron el auto con provisiones, armas e incluso una de sus mascotas, con el fin de huir bien equipados hacia México.
En medio de la broma, su hermano le indicó que solo podían salvar a una de sus queridas mascotas, y le preguntó a Milli cuál debía ser, a lo que ella contestó de forma muy sincera, “‘¡Al gato, idiota!”. Justificando su respuesta al decir que su perro “es lo peor, ya está muriendo. Déjalo, busca al gato”.
Tras dar varias vueltas por el pueblo sus hermanos finalmente le dijeron la verdad, y abrazada a su querido gato, Milli solo dijo, “¡Oh!”.
con información de: E!