Entrada, bebida y 100 euros de regalo para las chicas que no lleven bragas. Este es el cebo que la discoteca Caña Dulce, en el barrio de la Sagrera de Barcelona, usa para promocionar el club. El cartel, muestra a dos chicos medio desnudos que se sitúan por encima de unas cuantas chicas en ropa interior, su contenido altamente explicito es la estrategia de la discoteca para captar nuevos clientes: «Si vienes sin bragas te damos: entrada + copa gratis + 100 euros en efectivo». Los promotores de la discoteca argumentan que es una manera de atraer la atención y de reírse: «Si no hablan de ti no existes, no es nada más que una broma en un local muy familiar, donde todo el mundo se conoce».
«Todo empezó una noche que una chica que se casaba decidió hacer un striptease, y me vino a la cabeza una nueva forma de promocionar la discoteca», explica uno de los promotores de la disco. A esta oferta, que ha sido anunciada en los últimos sábados de febrero, sólo se han acogido, de momento, dos mujeres. «Una le pidió permiso a su marido, se subió la falda y cuando vimos que no traía ropa interior le dimos 100 euros», explican los dueños del local, esto resalta el ambiente festivo de la noche, y no han recibido críticas por parte de nadie. Al contrario, un grupo de veinte personas ya han llamado a la discoteca preguntando si la oferta sigue en pie para este sábado.
No es nuevo que los clubes nocturnos utilizan la clientela femenina, a la que intentan atraer con ofertas y descuentos, para llegar a los clientes masculinos. Pero parece que el cartel para promocionar la oferta ha ido demasiado lejos: el colectivo Dones Juristes pondrá en marcha mañana mismo una campaña de sensibilización y boicot en contra de la publicidad sexista.
Dones Juristes tiene, desde el pasado diciembre, un portal de denuncia ciudadana para luchar contra el sexismo en la publicidad. «Es de las peores cosas que hemos visto, el mensaje es ultrajante y humillante hacia las mujeres», lamenta Marisa Fernández, abogada responsable del buzón de denuncias. El procedimiento, a partir de ahora, será analizar bien el contenido del cartel, ver si se puede denunciar, y poner en marcha, desde mañana mismo, una campaña de sensibilización y boicot.
Fernández explica que desde que empezaron a promocionar la web han recibido muchas denuncias, y que cuando se contactan con la empresa de la que reciben una queja, lo más habitual es que les aseguren que todo es una broma y que se le intente restar importancia. Es precisamente la percepción en la que está anclado la discoteca Caña Dulce, que trata de cerrar el tema.
Fuente: El país