Si te gusta el sexo duro y practicar mil posturas como si estuvieras en el set de una película porno, puede que te estés perdiendo el mejor sexo de tu vida.
Se trata del ‘sexo vainilla,’ el tipo de sexo que te asegura los orgasmosmás intensos que tendrás nunca. En el ‘sexo vainilla’ no hay azotes, ni juguetes ni acrobacias del Kamasutra: acá triunfan las posturas sencillas, como el misionero, el contacto, los abrazos, los besos, las miradas y la transmisión de emociones.
Incluso si no tienes sentimientos por tu compañer@ sexual puedes actuar como si sintieras amor por la persona, y practicar un sexo compenetrado y delicado, lleno de caricias y besos. Es tal la compenetración que incluso podrías llegar a enamorarte de la persona.
En esta modalidad no hay sumiso ni dominante, es un intercambio de placer de igual a igual, donde ambos logran conectarse profundamente.
Quizás deberías probar esta forma de tener sexo, e intercalarla con otras más intensas, lo importante es no caer en la monotonía.