Esta historia de amor desafió todos los estereotipos

Pradyumna Kumar Mahanandia nació en 1949 en el seno de una familia de pobres tejedores de Odisha, India. Por su condición de pobreza sufrió discriminación  y muchas dificultades para llevar una vida normal.

Su infancia fue dura. Después de varios intentos fallidos para estudiar arte, a consecuencia de su situación económica, logró ingresar en la universidad autónoma Khallikote en Brahmapur, en 1971, y más tarde se enroló en Facultad de Arte de Nueva Delhi.

Mahanandia tenía un talento nato y logró saltar a la fama en su país cuando por casualidad vio pasar a la cosmonauta soviética Valentina Tereskova,  a quien dibujó y buscó para poder entregarle el retrato en persona. Su osadía y talento acapararon titulares de la prensa en su país, lo que se tradujo en que la primera ministra Indira Gandhi le pidiera que le hiciera un retrato.

Gracias a esto pudo obtener permiso para trabajar bajo la Fuente Sagrada en Connaught Place, en Delhi, de donde lo expulsaban antes. Este nuevo espacio para desarrollar su arte le permitió conocer a Charlotte Von Sledvin, una joven de 19 años,  de origen sueco que estudiaba en Londres y que había oído hablar de sus retratos por lo que se acercó para que le hiciera uno:

“Era un experto haciendo retratos”, recordaría ella muchos años después. “Había leído sobre él en un periódico y había ido con él a que me hiciera un retrato. Pero no podía hacerme uno perfecto y tuve que venir ante él durante tres días consecutivos. Fue entonces cuando me dijo que ya se había decidido en el cielo, que iba a ser su esposa. Supe que había encontrado a mi alma gemela”.

Fue amor a primera vista. En una época en que el matrimonio interracial era mal visto tanto en Europa como en la India, PK Mahanandia y Von Sledvin se casaron. Pero la joven debió regresar a Suecia y le pidió a su esposo que la siguiera …ella quería pagarle el pasaje pero el joven indio no aceptaría que su mujer costeara el billete de avión por lo que emprendió su viaje a Suecia en bicicleta, vendió todas sus pertenencias y comenzó su travesía en 1977.

Salió de Nueva Delhi y atravesó Afganistán, Irán, Turquía, Bulgaria, la entonces Yugoslavia, Alemania, Austria y Dinamarca.

Se alimento y costeó el viaje con retratos que hizo a lo largo del camino. Luego de cuatro meses y tres semanas llegó a Gotemburgo, en el lado oeste de Suecia, el 28 de mayo de 1977.

Los guardias fronterizos no podían dar crédito a su historia porque, además, Von Sledvin está emparentada con la familia real sueca, pero la joven, quien había viajado hasta allí, la confirmó. La pareja vive desde entonces en Boras, Suecia.

Después de 40 años de matrimonio y dos hijos, PK Mahanandia es Embajador Cultural de la tribu Odiya de la India a Suecia.

Sus pinturas han sido expuestas en las principales ciudades del mundo y han aparecido en tarjetas de UNICEF y trabaja como asesor de arte y cultura de la UNESCO.

La historia se ha vuelto viral y en la actualidad el cineasta de Bollywood Sanjay Leela Bhansali está planeando hacer una película sobre la historia de amor de PK Mahanandia y Charlotte Von Sledvin, y está en negociaciones con Warner Bros para su producción.