Esta es la historia de Meagan Barnard una joven que soñaba con ser modelo pero que una extraña condición física le prohibió continuar con sus anhelos y casi acaba con su vida.
La joven de 24 años que llegó a pensar en el suicidio y se negó a vestir faldas o trajes de baño durante 10 años, hoy habla claro de su vida e incluso se muestra bella y libre en bikini.
La enfermedad que padece Meagan se llama linfedema y afecta a su pierna izquierda, situación que ha reducido su movilidad y la hace lucir desproporcionada.
Lo más sorprendente de su historia es que le escondió esta condición por dos años a su novio, Rober Neidenfeuhr (27):
“Cuando lo hice público, él no tenía idea. Era extremadamente cuidadosa, habían muchas puertas cerradas, luces apagadas, esa clase de cosas”
confesó.