La vida perruna es la vida mejor. ¿Quién no quiere ser un can? Tirado a la sombra o al sol, comiendo a escondidas debajo de la mesa. Saliendo a pasear o sacando la cabeza por la ventanilla del coche con la lengua fuera.
Si hasta los humanos sentimos envidia de nuestras mascotas,¿cómo no van a querer los demás animales ser perros también?
Estas vacas son un claro ejemplo de animales que quieren ser perros, y estamos seguros de que no son las únicas.
Sentada como un mastín o un pastor alemán, observando todo, vigilando como un buen cancerbero
Descansando en actitud perruna, mejor conseguido imposible
Qué bonita es la vida contemplativa, todo el horizonte para nosotros y nuestra paz
Aprender a sentarse como un perro es esencial para ver pasar el tiempo en la granja
“Los perros nos llevan años de ventaja, esta posición es mucho más cómoda que la de una vaca”
El máximo nivel, tumbarse como se tumban algunos perros sobre un coche
“¿Vaca yo? De eso nada, perro de pura cepa”
Qué orgullosas algunas de su conseguida postura de perrito
Todo esto no es más que una ventaja para los granjeros. Ya no se tienen que preocupar de conseguirse un perro para sus granjas, con las vacas tienen 2 por 1.
Fuente: The Dodo