Este papá no aguantó ver al asesinó en serie qué mató a su hija. La reacción del criminal es indignante

Este es un caso realmente terrible. Un hombre llamado Michael Madison asesinó a tres jóvenes, luego las puso en bolsas de basura y las arrojó al sector de desperdicios de su departamento. La policía encontró los cuerpos gracias a que una vecina alertó por el olor a podredumbre. Recientemente se llevó a cabo el juicio para condenar al asesino. Madison recibió la pena de muerte. Antes de la sentencia el padre de Shirellda Terry, una de las víctimas, colpasó y se lanzó contra el acusado.

Nada parecía afectar a Michael Madison. Él se tomaba el juicio como si fuera algo totalmente ordinario, quizás ya había asumido que sería condenado a recibir la inyección letal. Él asesinó a tres chicas: Shirellda Terry (18 años), Angela Deskins (38) y Shetisha Sheele (28). Esto ocurrió en julio del 2013.

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El padre de Shirellda estaba dando su declaración, de repente hizo una pausa, se volteó y corrió a atacar al asesino de su hija.

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Madison, quien es también estuvo condenado por agresiones sexuales, fue defendido por los policías de la corte. La audiencia determinó que el señor Terry debía ser sacado de la sala. Madison no parecía haber resultado herido. 

En el 2013, una trabajadora reportó un olor extraño que provenía del garage de Madison, la policía investigó el lugar y encontró los cuerpos de las chicas en bolsas de basura selladas. El asesino declaró haber estrangulado a dos de las chicas, pero no recordaba haber dado muerte a la tercera.

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El juez de Causas Comunes del condado de Cuyahoga, Nancy McDonnell, aceptó la recomendación de un jurado sobre que Madison recibiera la pena de muerte. La otra opción era condenarlo a cadena perpetua sin opción de obtener la libertad condicional.

Los abogados de Madison nunca negaron su culpabilidad, se concentraron en salvar su vida presentando pruebas de los maltratos físicos y psicológicos que sufrió cuando era un niño.

La madre era adicta a las drogas y abusaba de él, también el padrastro y otros miembros de la familia lo maltrataban constantemente.

“Esta historia de abuso y su crianza disfuncional ciertamente no justifica lo que pasó aquí, pero sin duda proporciona una base para entender el tipo de persona en la que Michael Madison se convirtió”.

-David Grant, abogado defensor-

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