Alquileres exorbitantes e imposibilidad para acceder a la casa propia son moneda corriente en muchas de las urbes más famosas del mundo, desde Nueva York, hasta París. Para vivir en esas ciudades, hay que estar preparado para pagar el precio, literalmente. Sin embargo, en algunos rincones del planeta, son los mismos gobiernos los que ofrecen pagar una suma mensual a aquellos que estén dispuestos a relocalizarse hacia sus pagos.
Estos programas parecen una locura, pero en realidad hay varias ventajas, tanto para las ciudades que promueven estas iniciativas, como para los habitantes del lugar. Un pueblo o ciudad en problemas recibe nuevos residentes, y esto ayuda a estimular la economía local, mientras que los que se mudan allí reciben incentivos monetarios que pueden llegar a transformarles su vida por completo.
Condiciones climáticas hostiles, ubicación extremadamente remota o experimentos sociales son algunos de los factores que llevan a que una ciudad se proponga ofrecer esta alternativa a extranjeros o nacionales a mudarse allí. A continuación, 10 de los lugares más llamativos alrededor del mundo que requieren, con urgencia, nuevos y productivos habitantes.