Estos son los personajes más odiados de la televisión

Establecer un ranking tan clásico como el de los «plomos» de las series de televisión es todo un reto, pero hemos intentado no defraudar a ningún seriadicto. Y es que muy pocas ficciones se libran de esta cruz, entre protagonistas inaguantables a propósito, figuras a medio construir o, sencillamente, actores letales. ¿Cuáles son los diez personajes de la pantalla reciente que hay que tragar con sal de frutas? ¿Quién es vuestro insufrible favorito? ¿A quién echas de menos?

Joffrey Baratheon (Juego de Tronos)

El personaje más «ñe ñe ñe» de los últimos años. Dirás que Ramsay Bolton se está ganando a pulso el trono del más odiado de los Siete Reinos, pero lo de Joffrey es insuperable, incluso desde el infierno al que haya ido a parar. Y no solo por asesino despiadado, además por mocoso muy mala leche que no ve más allá de las faldas de su madre. Es como el niño tonto de tu clase al que te quedaste con ganas de dar un guantazo.

Rayna James (Nashville)

En la lista negra femenina de las series actuales destaca con diferencia y por muchos méritos Rayna James, la estrella del country que encarna Connie Britton en Nashville. Y eso que podría ser un personaje interesante, como cantante y empresaria ambiciosa, pero sus culebrones familiares y amorosos son lo peor. La desgana de la actriz, a la gresca con el equipo durante mucho tiempo, es un factor de ‘haterismo’ importante.

Ted Mosby (Cómo conocí a vuestra madre)

No hace falta ser una diva para caer mal al público, y si no te acuerdas de Ted Mosby, el oso amoroso del género sitcom. Al protagonista de Cómo conocí a vuestra madre le agarró la manía hasta al propio actor, Josh Radnor, que le dio vida durante nueve años y que ponía cara de póker cada vez que le preguntaban sobre la serie. Y no es para menos. Ted era capaz de vender a su madre a cambio de novia.

Ross Geller (Friends)

Por motivos similares Ross Geller se convirtió en el fichaje más irritante de Friends, la otra gran comedia de la pantalla estadounidense. Aunque nunca nos ha quedado claro quién sobraba en aquel grupo de amigos (cada uno tiene su preferido, como su equipo de fútbol, y su descarte), sí hay consenso en que el personaje de David Schwimmer era el más insoportable. Sus idas y venidas con Rachel no fueron de ayuda.

Dana Brody (Homeland)

En todo ranking de gente televisiva odiosa debe haber niños o adolescentes, y el nirvana en el bando de las chicas lo alcanzó Dana (Morgan Saylor), de Homeland. Nunca entendimos por qué los guionistas daban tanto espacio a la hija de Nicholas Brody, pero tener que soportarla cuando su padre casi había desaparecido de la serie fue una tortura. La única con derecho a poner caras de loca en Homeland es Claire Danes.

Henry Mills (Once Upon a Time)

El compañero de Dana Brody en el podio masculino es sin duda Henry Mills, el hijo de Emma y Regina en Once Upon a Time. La suya fue una evolución nefasta, de pequeño simpático en la primera temporada a pánfilo prepúber en la segunda. Lo peor de todo es que dio el estirón entre una entrega y otra, y ver a un muchacho con pelos en los huevos haciendo de niño quejumbroso es bastante ridículo. ¿No hay un hechizo para él?

Sookie Stackhouse (True Blood)

Una serie con vampiros, brujas, hombres lobo, demonios y otros seres de lo más horribles pero es a la protagonista humana a quien deseamos una muerte lenta y dolorosa. Algunos guardábamos cariño a Anna Paquin por aquella monada de Oscar que ganó a los once años gracias a El piano, pero True Blood fue la bajona definitiva. Sookie Stackhouse era una insufrible dama en apuros que solo tenía suerte para acostarse con tipos buenos.

Andrea Harrison (The Walking Dead)

Una superviviente tan incomprendida como pesada. Tras la muerte de Lori, la impredecible esposa deRick Grimes, Andrea Harrison (Laurie Holden) se alzó como la mujer más odiada de The Walking Dead. Los productores usaron su personaje como un punto de desencuentro con el resto de protagonistas, sobre todo al convertirla en aliada del Gobernador. ¡Qué equivocada estaba! Se hizo querer solo en sus últimos capítulos.

Pete Campbell (Mad Men)

El personaje mejor construido de nuestro top, pero no por ello menos despreciable. Matt Weiner y su equipo de guionistas crearon en Pete Campbell (Vincent Kartheiser) uno de los protagonistas más patéticos de Mad Men, un ejecutivo envidioso y rastrero, tan potente porque encierra muchos complejos del hombre de los 60, la apariencia y la hipocresía. A su favor diremos que era el único cuyos vicios veíamos de frente.

Meg Griffin (Padre de familia)

A la pequeña de los Griffin no la quiere ni su familia. Meg (quizá no sepas que le pone la voz en EEUU la actriz Mila Kunis), el intento de Pepito Grillo que Seth MacFarlane creó para Padre de Familia, es uno de los personajes más risibles de la televisión. Una suerte de Lisa Simpson pero mucho más pesada que, a fuerza de ser humillada por su padre y su hermano, solo ha quedado para disfrutar viéndola sufrir.

VÍA: http://www.gonzoo.com/