Todo el mundo hace caca, y a la vez, todo el mundo merece la felicidad. Entonces, desde un punto de vista lógico, todos debemos poder hablar sobre la caca con la persona que más feliz nos hace. Sin embargo, eso no siempre es así -a veces las personas están muy estancadas- y lo único que necesitan es relajarse y dejarlo ir. Me refiero a la conversación. Eso haría que el vínculo amoroso sea más llevadero, más íntimo, más entretenido. Entonces, cortemos la mierda y démosle para adelante.
¿Qué es una conversación acerca de la caca?
Una conversación sobre la caca es básicamente el dialogo que se produce cuando dos personas se refieren a cómo es su rutina de baño cuando van a hacer. Y claro, si amas a tu novio o a tu novia, ¿Por qué no hablar de algo tan común? No hace falta presionarse, no es necesario mencionar el tamaño ni el color, pero sí es importante llevar la conversación a un plano cotidiano. Más que mal, todas las personas hacemos caca. No hay mucho a lo que darle vuelta.
¿Por qué conversar acerca de la caca?
Es sinónimo de confianza. Si lo haces con tus amigos o amigas, ¿por qué no hacerlo con la persona que amas? Todas las relaciones tienen momentos incómodos, y es en esos momentos cuando se pone a prueba el amor de verdad. No quiere decir que si hablas con tu pareja sobre la caca, tienes la felicidad garantizada. Pero sí, facilita mucho las cosas.
Además, según estudios arrojados por el Huffington Post, hablar con tu pareja de una rutina tan habitual como ir al baño muestra la confianza que se tiene en la relación, consiguiendo que esta sea más relajada, más íntima y más desternillante.
Y tú, ¿hablas sobre caca con tu pareja?