Frases de Sigmund Freud para ahorrarse dolor y disfrutar el placer

Cuesta trabajo imaginar a una de las mentes más sofisticadas que existió sobre la Tierra lidiando con problemas tan sencillos, en comparación de sus grandes aportaciones al conocimiento humano, como lo es el amor o las relaciones de pareja. Uno de estos casos fue el de Sigmund Freud. Nuestras vidas no serían las mismas sin la figura de esta prominente pensador, pues el psicoanálisis marca un antes y un después en la entendimiento de la mente humana gracias a que tomó al inconsciente como objeto de estudio.

A pesar del gran trabajo intelectual que hizo en vida, Freud también padeció los estragos del amor, o al menos los vivió muy de cerca. Él no hubiera sido el mismo sin su colega, mentor y amigo, Joseph Breuer. Incluso sin él, Sigmund no hubiera encontrado las bases para despegar con sus teorías psicoanalíticas. Breuer era un excelente médico, fisiólogo y psicólogo, pero es mundialmente reconocido por su método de hipnosis que usó para revelar malestares “ocultos”.

Gracias a este método, el maestro de Freud conoció a la paciente Anna O, de quien se enamoró tras convivir un largo tiempo mientras trataba de curarla de histeria. Breuer era uno de los doctores más respetados de Viena y tener una relación con ella lo llevaría a la ruina. Por fortuna, Freud estuvo siempre ahí para aconsejarlo y guiarlo, porque con esto se demuestra que hasta a las mentes más sofisticadas de la humanidad pueden tener problemas con el amor.

A pesar que Breuer le doblaba casi la edad a Sigmund, su discípulo tuvo pudo aconsejarlo para que tomara las mejores decisiones con respecto a su trabajo, amor y familia. La postura estoica y racional que tuvo Freud ante la vida se puede ver en toda su obra y puede que al igual que a Joseph Breuer, alguna pequeña frase del padre del psicoanálisis pueda calmar nuestros corazones.

“Las flores son un descanso para la vista. No tienen ni emociones ni conflictos”.

“Si dos individuos están siempre de acuerdo en todo, puedo asegurar que uno de los dos piensa por ambos”.

“Quien piensa en fracasar, ya fracasó antes de intentar; quien piensa en ganar, lleva ya un paso adelante”.

“Las ilusiones se encomiendan a nosotros porque nos ahorran dolor y nos permiten disfrutar del placer. Debemos, por tanto, aceptarlas sin quejas cuando se chocan contra la realidad en la que se hacen pedazos”.

“No existe ningún punto de partida si no se sabe bien a donde ir”.

“Recordar es el mejor modo de olvidar”.

“Un hombre no debería luchar por eliminar sus complejos, sino entrar en acuerdo con ellos: son legítimamente los que dirigen sus conductas en el mundo”.

“De nuestras vulnerabilidades vienen nuestras fortalezas”.

“Uno es dueño de lo que calla y esclavo de lo que habla”.

“Un hombre que ha sido el indiscutible favorito de su madre mantiene durante su vida el sentimiento de un conquistador”.

“El hombre loco es un soñador despierto”.

“La mayoría de la gente no quiere la libertad realmente, porque la libertad implica responsabilidad y la mayoría de la gente teme la responsabilidad”.

“Los sueños son a menudo más profundos cuando parecen más locos”.

“El que sabe cómo esperar no necesita hacer concesiones”.

“He sido un hombre afortunado en la vida: nada me resultó fácil”.

“Nunca estamos tan indefensos contra el sufrimiento como cuando amamos”.

“De error a error se descubre la verdad completa”.

“El que tiene ojos para ver y oídos para escuchar puede convencerse a sí mismo de que ningún mortal puede mantener un secreto. Si sus labios son silenciosos, parlotean con sus dedos; la traición rezuma de ellos a través de todos sus poros”.

“La ciencia moderna aún no ha producido un medicamento tranquilizador tan eficaz como lo son unas pocas palabras bondadosas”.

Si estas frases de Sigmund Freud sirvieron para mejorar alguno de tus días, puedes completar sus enseñanzas de una manera muy placentera; da click aquí y conoce 10 películas inspiradas en su teoría psicoanalítica. En cambio, si ya estás listo para dar el último paso, puedes leer un artículo sobre los cuatro pasos que debes seguir para ser feliz según la neurociencia, sin olvidar conocer algunas cosas que tienes que hacer diariamente para nunca perder tu sonrisa.

Fuente: Culturacolectiva