Una humilde familia de Padre Las Casas recibió una inesperada noticia poco después de Navidad: ganaron un auto 0 kilómetros en una rifa organizada por Bomberos. Sin embargo, pasaron rápidamente de la buena a la mala suerte cuando se dieron cuenta que perdieron el boleto ganador.
Fue el pasado 21 de diciembre cuando José Luis López se trasladó en su silla de ruedas desde su hogar en una zona rural de Padre Las Casas hacia Temuco. Allí, mientras realizaba unos trámites en compañía de su hijo de 9 años Ángelo, decidió comprar un boleto de rifa para ayudar al Cuerpo de Bomberos.
«Compré un boleto motivado por la labor que realizan, especialmente en zonas rurales como la nuestra», declaró López a El Austral.
Según su relato, «como hace toda la gente, me olvidé del tema, hasta que el 30 de diciembre mi hija recibe un llamado del superintendente (de Bomberos) de Temuco, donde dice que ganamos uno de los dos autos».
No obstante, no pudieron encontrar el boleto ganador pese a que buscaron por toda la casa.
«Ese auto significaba un tremendo apoyo en la situación en que estamos», remarcó.
Hace 10 años, López fue víctima de un accidente que lo dejó en silla de ruedas y sin posibilidades de retomar el trabajo que tenía. Su hogar queda a unos 40 minutos en vehículo de Padre Las Casas, por lo que trasladarse allí, o a Temuco, supone un alto gasto.
Pero aun asoma una luz de esperanza en su camino, pues según las reglas, si en 30 días no aparece alguien más cobrando el premio, el auto será suyo.
«Si lo ganamos, lo venderé para comprar una camioneta de segunda mano, para no echar a perder un auto tan bonito en estos caminos», afirmó López.