Las dos jóvenes, llamadas Mitzia Mendoza de 18 años y Clarissa Miranda de 17, murieron trágicamente al ser decapitadas.
Asistían a ver las carreras de caballos en un hipódromo que se encontraba al lado de la pista de aterrizaje de la región de Chínipas, Chihuahua.
Cuando vieron acercarse una avioneta a la pista, tuvieron una lamentable idea: tomarse una selfie para inmortalizar el momento. Lo que tristemente termino en tragedia. Las señoritas no dimensionaron lo peligroso que era interponerse en la pista cuando un avión aterriza y por su parte el piloto no fue capaz de esquivarlas, todo resulto en que un ala del avión termino decapitando a ambas.
El piloto al darse cuenta de lo sucedido se dio a la fuga, dejando abandonada la avioneta. Actualmente se abre una investigación para esclarecer lo que sucedió y este terrible accidente nos recuerda que no debemos cometer actos imprudentes.