A ver, vamos a comenzar poniendo al día a todos los que se han perdido la novela del año: Blac Chyna conoció a las Kardashian a través de su entonces novio, Tyga, quien terminó con ella para hacer arrumacos con una aún ilegalmente joven Kylie Jenner. Blac Chyna, por razones que han sido presumidas por todo el clan Kardashian y una buena parte del Internet, decidió superar a Tyga… con el medio-hermano mayor de Kylie, Rob Kardashian.
Los argumentos de la familia bajaron en decibeles cuando Blac Chyna quedó embarazada de una nena, a quien la pareja llamó Dream. Un sueño es lo que era su vida… aparentemente.
Hasta que un día Rob despertó y Chyna se había ido con su hija de sólo un mes, sus cosas y sus waffles. En navidad.
Desde entonces la relación ha sido ambivalente, con más rumores que contenido, fotografías que nos dejan con más preguntas que respuestas y, hay que admitirlo,más de un poquito de lástima por Rob Kardashian.
Sin embargo, el pasado 4 de julio esta triste historia dio un giro inesperado:
Durante el día, Rob Kardashian habría recibido un video de Blac Chyna besándose con otro hombre. Esto aparentemente habría acabado con su paciencia, motivándolo a ventilar todos los problemas maritales que alguna vez habían tenido, con escándalo y alevosía, incluyendo una cirugía de $100,000 que pagó tras el nacimiento de su hija o la larga lista de hombres con los que Chyna lo habría engañado.
Blac Chyna respondió en su Snapchat que Rob la habría golpeado durante su relación y que “la luz saldrá a la luz”.
En vista de esto, a Rob no le bastó con organizar su propia esta humillación pública: tuvo que pasarse porque es Rob Kardashian, desastre andante, después de todo, y decidió publicar imágenes de su ex desnuda.
La publicación de estas fotografías no sólo es una falta de respeto terrible y totalmente inmoral— en el estado de California, Estados Unidos, es un crimen realmente serio que se castiga con un mínimo de seis meses en prisión ADEMÁS de una multa de $1,000 dólares, conocido como revenge porn, “porno de venganza”.
“¡Pero!” dirán algunos. “Rob no subió videos y Blac Chyna le mandó esas fotografías, además que sale semi desnuda todo el tiempo. ¿Qué tanto puede importarle?”
Pues le importe a Blac Chyna o no, definitivamente le importa al estado de California, donde la distribución de revenge porn se mide por cuatro importantes, pero simples, criterios.
1. El acusado tiene en su posesión fotos o videos de partes íntimas del cuerpo de otra persona con el mutuo acuerdo tácito de que estas imágenes no serán compartidos con terceros.
2. La distribución de estas imágenes, en las cuales la víctima es identificable.
3. Tiene la intención de causar daño emocional a la víctima.
4. La víctima sufre daño emocional.
Si el fiscal logra comprobar que Rob Kardashian logró dar estos cuatro pasos, ni su madre podrá evitarle la cárcel, aunque lograran llegar a un acuerdo con los abogados de Blac Chyna. El crimen fue cometido contra el estado de California en el momento que Rob publicó las fotos. Incluso Instagram podría demandarlo por uso indebido de la plataforma y distribución de pornografía.