Scott Fricker (48 años) y su esposa Buckley Kuhn-Fricker (43) estaban preocupados. Sabían que su hija adolescente de 16 salía con un compañero de colegio de Lorton, Virginia, pero tenían certezas de que la ideología del jovencito era macabra y no era lo que ellos pretendían para ella. Era abiertamente racista, supremacista, neonazi. Algo que chocaba con los valores de su familia. Fueron semanas intentando que ella rompiera con él, que dejara de verlo, sin poder conseguirlo.
Tres días antes de Navidad, los Fricker fueron asesinados. El principal sospechoso para la Policía del Condado de Fairfax es el joven de 17 años que había estado adoctrinando con sus ideas a la hija. Frustrado por la prohibición impuesta a su novia, decidió matarlos luego de una feroz discusión en su propia vivienda.
Días antes del asesinato, Kuhn-Fricker había enviado imágenes a las autoridades del colegio al que ambos adolescentes concurrían donde se podía ver al sospechoso con consignas antisemitas, homofóbicas, referencias a Adolf Hitler, libros sobre nazismo y demás ítems.
En el correo electrónico en el que se advertía sobre el jovencito, la mujer indicó que era un «monstruo» al adherir y difundir ese tipo de ideas. «Me sentiría mal reportándolo si sus publicaciones online fueran de un adolescente normal, pero es un monstruo y no tengo pena por gente así. Él hizo estas elecciones. Él está esparciendo odio«, escribió Kuhn-Fricker a los responsables del centro educativo.
Pero su fanatismo no terminaba allí en las redes sociales. El neonazi compartía con su hija sus ideales, convenciéndola de ellas y llevándola por el camino supremacista. Incluso, desde hacía un tiempo, estaba interesada en todo lo concerniente a la Segunda Guerra Mundial: «¿Sabías que los judíos son, en parte, culpables de la Segunda Guerra Mundial?», fue uno de sus comentarios frente a sus padres.
El viernes pasado, los padres ingresaron a la habitación de su hija y allí estaba él. Luego de una feroz discusión, el menor desenfundó un arma y disparó contra los padres de su novia. Los mató en el acto. Luego, quiso matarse disparándose en la cabeza, pero no lo consiguió. Ahora está internado en grave estado, de acuerdo con The New York Times.