El caso conmocionó a todos. Nahir Galarza, una joven argentina de 19 años confesó haber asesinado a su novio Fernando Pastorizzo, el 29 de diciembre recién pasado. Ahora, la joven se encuentra recluida en prisión preventiva, al menos hasta el próximo mes de marzo. Una de las cosas que se ha conocido sobre su vida en prisión es que se niega rotundamente a recibir la comida que le dan en la comisaría y solo come lo que le lleva su madre.
El juez Guillermo Biré dijo que se le permitió a la familia de la joven que lleve los alimentos, pero que sin embargo no es excusa para que halla visitas: es un uniformado el que recibe la comida y se la lleva a la joven.
Otro detalle conocido es que Nahir pidió un ventilador para su habitación, cosa totalmente comprensible considerando que en Argentina están en pleno verano y las temperaturas pueden superar los 35°. También pidió un colchón, pero se lo negaron.
Han surgidos rumores sobre supuestas solicitudes de la joven que no son ciertas. El juez Biré aclaró que en ningún momento la joven pidió que se le instalara un aire acondicionado o que pidiera un entrenador personal para seguir practicando deporte. El vocero de la familia Galarza asegura que la joven no tiene ningún tipo de beneficios especiales, y que pasa gran parte de su día leyendo sobre temas de numerología, karma y otros temas esotéricos.
Nahir asesinó a su novio a sangre fría, luego de una tortuosa relación en que el joven recibía agresiones físicas y amenazas por parte de Nahir y de su padre policía.
Fuente: Pulzo