La “Gran Procesión del Chumino Rebelde” se celebró en marzo por las calles del centro de Málaga convocada por quienes se hacían llamar “Hermandad del Coño Insumiso”. Durante más de dos horas portaron la imagen de una vagina de látex de grandes dimensiones con la que pretendían hacer mofa de los símbolos y dogmas sagrados de quienes procesan la religión católica según mantiene el Ministerio Público. Comitiva acompañada de los ornamentos que distinguen las procesiones de la Virgen en Semana Santa. Mantillas, nazarenos, velas, túnicas y flores en el trono.

A lo largo del recorrido la acusada, la líder feminista Elisa Mandillo y sus acompañantes profirieron burlas y proclamas que atacaban a verdades inmutables de la fe católica incluso con una oración de estructura y formato similar al Credo de los católicos pero en el que se ensalzaba a la vagina según la acusación pública.

La fiscalía acusa a Elisa Mandillo como autora de un delito contra los sentimientos religiosos. Pide para ella diez meses de multa con una cuota diaria de 10 euros, en total 3.000 euros más la inhabilitación para el sufragio activo durante ese periodo.

La denuncia fue presentada en su día por la Asociación de Abogados Cristianos.

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