Cuando se acabó la Semana de la Moda en Nueva York, la modelo ugandesa Aamito Lagum, de 23 años, había participado en las pasarelas de J. Mendel, Tadashi Shoji, la línea de ropa Yeezy ⎯de Kanye West⎯, y Ohne Titel; y fue la encargada de cerrar el desfile del diseñador Zac Posen.
Fue una semana llena de triunfos para Lagum, quien se inició en el modelaje hace tres años después de ganar la primera temporada del programa de televisión “Africa’s Next Top Model”.
Pero mientras sorteaba los apuros de las pruebas de vestuario, peinado y maquillaje, recibió un mensaje de un amigo que le advertía sobre una publicación en el Instagram de MAC Cosmetics, los productos con los que el artista Kabuki había maquillado a Lagum y a las otras modelos para el desfile de Onhe Titel. La fotografía que MAC publicó era un close-up de perfil de los labios de Lagum, pintados de morado. Muchos de los comentarios, en su mayoría publicados por troles anónimos de internet, eran racistas y despectivos.
“Al principio, me sentí halagada, porque en verdad creí que mis labios se veían preciosos”, comentó Lagum por teléfono. “Pero cuando comencé a leer los comentarios, fue un poco inquietante. Escribieron cosas horribles y no estaba tan sorprendida, lo cual es desalentador”. La modelo compartió la foto de una publicación en un blog sobre el incidente, y escribió: “Mis labios provocan noches de insomnio”.
Instagram es la red social preferida por la industria de la moda y la belleza, pues se trata de publicar fotos lindas. La retórica desagradable usualmente se relega a Twitter, a los comentarios en YouTube y a los blogs. Pero de repente una compañía de belleza se vio expuesta a la fealdad de internet y su cuenta de fotos, dedicada al glamur, se convirtió en una plataforma de odio anónimo.
Esto generó un dilema para MAC. “En general, los seguidores de MAC son de opiniones firmes, y nosotros promovemos el diálogo”, explicó Karen Buglisi Weiler, presidenta global de la marca. “Pero no toleramos el abuso ni la crueldad”.
Weiler y su equipo monitorearon los comentarios y unas horas más tarde, decidieron actuar. Contactaron a Instagram y denunciaron los que eran racistas y provocadores. Al día siguiente, la compañía publicó una imagen que decía: “Todas las edades, todas las razas, todos los sexos”.
La modelo Aamito Lagum caminando en la pasarela del evento de otoño 2016 de Ohne Titel. Credit Slaven Vlasic/Getty Images
Y cuando Alexa Adams y Flora Gill, las diseñadoras de Ohne Titel, se dieron cuenta de que la foto estaba siendo opacada por comentarios racistas, publicaron una imagen de Lagum en su Instagram para apoyar a la modelo. Esta imagen ha recibido más likes que cualquier otra foto que hayan publicado. “Esa respuesta ha sido muy positiva”, declaró Adams, aunque añadió: “Fue muy impactante ver que en una página tan visible como el Instagram de MAC la gente estuviera expresando tanto odio. Esto solo respalda la idea de que las marcas de belleza y moda deben apostarle a una definición más diversa de belleza”.
Tomi Gbeleyi, de 24 años, una consultora educativa en Toronto que creó una cuenta en Instagram para promover a artistas de maquillaje y blogueros negros, se sintió molesta pero no sorprendida al ver la respuesta ante la foto de los labios de Lagum. En los días que siguieron, miles de personas también usaron internet para promover la inclusión.
Lagum también lo hizo. Compartió una representación digital de sus labios fruncidos, publicada por un diseñador gráfico en Sudáfrica, y pidió a sus seguidores que compartieran fotos de sus labios con la etiqueta: #PrettyLipsPeriod.
“Vi que podía ser una activista para las mujeres jóvenes de color o para cualquier mujer que se sienta diferente”, declaró, después de volar de Londres a Milán, donde la esperaban las exclusivas pasarelas italianas.
Con información de http://www.nytimes.com