El caso de la muerte de Lynette Daley en Coffs Harbour, Australia, lleva años en desarrollo. Todo ocurrió en enero del 2011, pero todo lo que lo rodea es tan confuso, que aún hay mucho de él que no se entiende. La manera en la que encontraron a la mujer fue trágica e impactante, igual que lo que había sucedido antes.
La hallaron detrás de una camioneta completamente desnuda, cubierta en sangre y en agua de mar. Tenía serias heridas que habrían sido causadas por un asalto sexual, en el que habrían participado dos hombres.
Adrian Attwater y Paul Maris son los dos acusados. Pero en los últimos días, en la investigación que aún continúa, han insistido en su inocencia.
Ellos dicen que sí, que tuvieron relaciones con la mujer… pero que ella había dado su consentimiento. Después de beber mucho alcohol, habían hecho un “salvaje” trío sexual.
Luego de eso, Attwater notó que tenía sangre en su muñeca, y se dio cuenta de que venía de la mujer. Además, se había manchado el colchón y el olor era horrible. Decidieron ir a bañarse al mar para limpiarse.
Pero el hombre no se había dado cuenta de que las heridas de Daley eran muy graves…y se habían producido en sus partes íntimas.
Cinco minutos después, ella empezó a convulsionar. Luego simplemente dejó de respirar.
En la corte se insistió que las heridas fueron productos del fuerte y constante abuso de las hombres hacia Daley, pero Attwater siguió defendiéndose con palabras que algunos encontraron muy duras.
“Esas cosas pasan… las mujeres serán mujeres, y los hombres serán hombres”.
-Adrian Attwater-
Las palabras del otro involucrado no fueron menos directas.
“Bueno, ella no se negó cuando yo también me uní. Se movió hacia mí para darme sexo oral”.
-Paul Maris-
Y tras estas declaraciones, el juicio continúa… para ver qué pasará con la historia de esta mujer, que además era madre de siete niños. ¡A los que enviamos todo nuestro apoyo!
Upsocl