Laura De es una joven chica de Bélgica que tiene sus ideales y gustos claros. Ella no quiere ser determinada por las clásicas normas sociales que seguimos, muchas veces sin cuestionar. Y una de las demostraciones que hizo para dejar esto en claro fue dejar de depilarse las axilas.
Todo comenzó cuando surgió la oportunidad de participar en una sesión de fotografías con Florence Lecloux, una artista local, quien quería enfocarse justamente en enfrentarse a las críticas contra las mujeres por los estándares y normas sociales, y promover la aceptación del cuerpo.
Laura estaba encantada y aprovechó de compartir varias de estas imágenes en su cuenta de Facebook, donde la reacción fue muy contraria a la que esperaba.
Recibió muchos insultos, incluso llegaron a llamarla prostituta, o que era «más sucia que un animal».
Al comienzo pensó que los comentarios negativos serían los esperados, debido a que muchos creen que está mal no depilarse. Pero llegó a ser acosada violentamente, incluso cuestionándola como persona. Fue tanto que debió buscar ayuda en un grupo feminista que la defendió.
Tras dos semanas del escándalo, volvió a compartir una imagen similar con una gran respuesta para todos sus detractores.
«Soy una chica que decidió hacer lo quería con su cuerpo. Como un hombre también puede hacerlo … Y la consecuencia de esto fue una humillación colectiva, acoso, insultos, amenazas. Me dijeron que en Bélgica y en Francia no necesitamos el feminismo, que las mujeres tienen suficientes derechos… Todo esta violencia demuestra que no lo tenemos«.
«En Bélgica, un país que se llama a sí misma libre y desarrollado, cuando una mujer quiere decir ‘No a la depilación con cera’ se le penaliza hasta que vuelva a estar en estándar social. Sólo quiero decir: Gracias. A toda esa gente que me apoyarme con sus comentarios, sus mensajes privados, compartiendo mis fotos y proyectos artísticos. Niñas, niños y no binario que luchan por un mundo más justo con valor e flexibilidad, son mis héroes».
Después de dejar callados a sus críticos, se depiló y compartió una imagen nueva con sus axilas al descubierto. Esto para demostrar que no era el cerdo que muchos dijeron, que no tiene que ver con eso, sino que: «Es mi cuerpo, mi elección«.
«Encuentro increíble que en 2016 una mujer que publica una foto de ella al natural, como un hombre, se convierta en víctima de una paliza así».