Hacer llamadas al extranjero
Llamadas al extranjero están bloqueadas en el país. Según un informe del 2016 de la ONG Amnistía International, los norcoreanos no pueden contactar a los familiares que abandonaron el país.
Según el informe, en Corea del Norte se observa una creciente venta ilícita de móviles y tarjetas SIM importadas. De esta manera, los ciudadanos que residen cerca de la frontera pueden acceder a las redes telefónicas chinas y comunicarse directamente con personas que se encuentran fuera del país.
Los individuos que hacen llamadas por teléfonos ilegales pueden enfrentar cargos e incluso ser acusados de traición, si contactan con alguien de Corea del Sur u otros países calificados de ‘enemigos’.
Conducción libre
Según señala Lankov y contrariamente a la creencia popular, los vehículos particulares no están prohibidos en el país, a pesar de que hasta hace poco no se podían comprar y solo podían ser regalados. Sin embargo, de momento, un coche privado sigue siendo algo exótico.
Es muy complicado lograr comprar un coche como particular. Por ello, hoy en día algunos norcoreanos empiezan a registrar sus vehículos personales bajo nombres de instituciones estatales.
Viajar al extranjero
Los viajes al extranjero desde Corea del Norte también están prohibidos. Según señala Lankov, salir del país solo es posible al lograr un permiso especial de las autoridades.
Llevar pantalones vaqueros
El año pasado las autoridades norcoreanas endurecieron las restricciones relacionadas con la indumentaria de los ciudadanos. En particular, se prohíbe llevar pantalones vaqueros (‘jeans’) y hacerse ‘piercings’. Según el portal IBTimes, el control del aspecto físico de los ciudadanos es más alto en las provincias de Hamgyong del Norte y Ryanggang, que se encuentran en la frontera con China, y son más propensas a la influencia occidental.
Criticar al Gobierno
Las organizaciones internacionales que luchan por los derechos humanos han denunciado en múltiples ocasiones la falta de libertad de expresión en el país asiático. En particular, a los norcoreanos y a los turistas que visitan el país se les prohíbe criticar o insultar a los líderes anteriores, Kim Jong-il y Kim Il-sung, así como a Kim Jong-un, o al sistema político del Estado.
Por ejemplo, los extranjeros, así como los ciudadanos norcoreanos, deberían hacer reverencias y depositar flores frente a los monumentos de los líderes difuntos para rendirles homenaje.
Extraído de: RT