Todo trabajo tiene sus pros y sus contras. En muchos casos una alta remuneración no compensa los infortunios que exige y en otros la flexibilidad y libertad del mismo no compensan su baja remuneración. La posiciones de fama farándula en general se ven muy vinculados con el suicidio o “muerte accidental” como le llaman a veces. Pero en general es complejo y difícil de encontrar datos sobre suicidio laboral.
El estadístico Steven Stack de la universidad Wayne State ha convertido el suicidio en su especialidad y a partir de sus estudios se pueden extraer datos de interés.
Recopilando la información de su extensa colección de trabajos científicos se puede generar una lista de los 13 trabajos potencialmente más propensos al suicidio. Es decir, por sobre la tasa promedio.
Según estudios sus estas son las estadísticas:
13. En el lugar número 13 al obrero semicalificado o no calificado con una tasa de suicidio de 1.46.
12. El obrero calificado y el operador de maquinaria suben al lugar número 12 con un valor de 1.63.
11. Los científicos y matemáticos en particular estamos en el lugar 11 con una tasa de 1.85.
10. Los comediantes y otros actores de las tablas obtienen el lugar 10 con un 1.9.
9. Los médicos suben a una tasa de 1.94 llegando así a la posición número 9.
8. En el número 8 se colocan los carpinteros con un valor de nada menos que 2.
7. Los pintores, escultores y artistas obtienen el lugar número 7 con una tasa de 2.12.
6. Los fotógrafos logran el sexto lugar con un factor de nada menos que un 2.5.
5. Los autores (escritores por ejemplo) están en el lugar número 5 con un valor de 2.6.
4. Los bailarines llegan con su danza el lugar número 4 con una tasa de 2.67.
3. Los actores y los músicos inesperadamente no obtienen el primer lugar sino el tercero para los actores con un
2.8
2. Los músicos con un 3.6.
1. Para el primer lugar obtenemos sorprendentemente (al menos para el que escribe) a los dentistas con una tasa de 5.45.
Vía Difundir