Los doctores le advirtieron que ella nunca sería capaz de caminar o hablar.
Tamara y Theodore, una joven pareja que reside en el estado de Kentucky en Estados Unidos, no tenía idea que la llegada de su primera hija, vendría con este tipo de noticias. Al momento de nacer, los doctores notaron que la piel de Paige estaba cubierta por una extraña masa blanca que lucían como delgadas escamas que sobresalían de su delicado cuerpo. Mientras más doctores investigaban la extraña condición con la que esta niña había nacido, más se atrevían a manifestar que Paige no lograría sobrevivir más de un año y que lamentablemente, no sería capaz de caminar o hablar.
La devastadora noticia remeció uno de los momentos que habían vivido como pareja. Su hija había nacido con ictiosis una enfermedad cutánea de origen genético que provoca que la piel se seque y escamosa, tal y como la de un pez. Ésta genera severas lesiones cutáneas, la aparición de gruesas escamas y comezón por toda la piel. Actualmente existen tratamientos que buscan apalear algunos de los síntomas que surgen con esta enfermedad cutánea, por lo que una persona puede aprender a vivir con esta alteración de la piel.
Pero al parecer, lo que padecía Paige era mucho más grave. Tras permanecer por meses en la sección de cuidados intensivos del hospital, sus padres temían a llevarla al exterior. Durante semanas prefirieron mantenerla al interior de la casa hasta que un día se atrevieron. Uno de los primeros que escucharon provino de una señora que los acusó de quemar a su hija e incluso, amenazó con llamar a la policía.
Luego del terrible incidente que atravesó la joven pareja, su madre le prometió que nunca dejaría que fuera víctima de bullying. En el transcurso de un año, su madre se empeñó en curarla. Día tras día utilizó todas las cremas y lociones que actualmente se encuentran en el mercado para que su piel mostrara mejorías y el resultado logró asombrar incluso a los doctores.
Con 14 meses de vida, Paige está llena de vida. A pesar de que los doctores manifestaron que no podría caminar, ni hablar, esta pequeña luchadora le ha dado una lección a todos y ha demostrado que con amor, absolutamente todo es posible. Gracias al empeño y a la dedicación de sus padres, esta niña será capaz de aprender a vivir con esta enfermedad que provoca que su piel se torne extremadamente sensible.
Aún cuando creamos que en la medicina encontraremos la solución, hay cosas inexplicables como el amor, que son capaces de curar lo incurable. Con el amor y la dedicación de sus padres, esta niña que desafió a la naturaleza, está más llena de vida que nunca.