Manchó su ropa con la regla y ésta es su genial respuesta a los que se rieron de ella

 Anushka Dasgupta es una joven estadounidense de origen hindú que un día cuando volvía a su hogar  luego de asistir a clases, sintió que tod@s reparaban en su aspecto

Manchó su ropa con la regla y ésta es su genial respuesta a los que se rieron de ella

Autor: Andrea Peña

1451334_889194421199178_4754511372140968696_n

 Anushka Dasgupta es una joven estadounidense de origen hindú que un día cuando volvía a su hogar  luego de asistir a clases, sintió que tod@s reparaban en su aspecto.

Según sus propias declaraciones en Instagram y Facebook

“No supe por qué era el centro de la atención durante una buena parte de mi camino, cuando una mujer me ofreció una toallita higiénica. Había manchado mis pantalones (con sangre)…era tarde y estaba sola en medio de la ciudad con una gran mancha roja a la altura de mi trasero y unos artísticos puntos rojos bajo el cierre de mis pantalones”…

Tras caminar hasta su hogar, lejos de avergonzarse decidió llegar y escribir esta respuesta que se ha vuelto viral:

I came home today at four minutes past nine after a long walk, a metro journey and a 10 minute bus ride. There’s nothing unusual about my evening except for the fact that multiple women walked up to me on my way home and asked me to pull my tee shirt down, most men ogled, all the kids I met didn’t notice/care. I came to know why I was the centre of attention for the better part of my journey when a woman (well meaning, I’m sure) offered me a sanitary napkin. I had stained my pants. So here I was, well past eight, standing alone at Esplanade with a massive red stain across my butt and a rather artistic red dot under the zipper of my pants. This post is for all the women who offered to help me hide my womanhood, I AM NOT ASHAMED. I bleed every 28-35 days, it is painful at times, I get moody at times, but I walk into the kitchen and get myself some chocolate biscuits and I’m good to go for the next eight hours come hell or high water because I AM NOT ASHAMED. This post is for all the men who ogled at me today, I AM NOT ASHAMED. Check out the big red blotch on my pants all you want, check out my butt, check out the way I move, come touch me if you dare, and I will show you that I AM NOT ASHAMED. I will take out a sanitary napkin and show you how it works while you can teach me how to pee in public (because clearly you’re not ashamed, and neither am I). To all the children who didn’t give a damn, DO NOT BE ASHAMED. There will be many bloodstains on pants, on skirts, on bedsheets, on cushion covers, on chairs, on tables, against the wall, and on the battlefield where YOU fight the stigma by NOT BEING ASHAMED. Do not whisper when you utter the word «PERIODS», do not subtly offer a woman a sanitary napkin, or a fresh change of clothes. ASK her if she needs one, TELL her she has stained her clothes, DO NOT HELP HER HIDE IT. I AM NOT ASHAMED. I AM NOT ON MY *period*. I AM ON MY PERIOD.

Una foto publicada por Anushka Dasgupta (@fatcatdontcare_1999) el


Llegué a casa hoy cuatro minutos después de las nueve, luego de un largo paseo, un viaje de metro y 10 minutos en autobús. No hay nada inusual acerca de mi noche excepto por el hecho de que varias mujeres se acercaron a mí camino a casa y me pidieron que tirara mi camiseta hacia abajo, la mayoría de los hombres, me comieron con la mirada, todos los niños que encontré en mi camino no se dieron cuenta. Recién llegué a saber por qué yo era el centro de atención durante la mayor parte de mi viaje cuando una mujer (con buenas intenciones, estoy segura) me ofreció una toalla sanitaria. Yo había manchado los pantalones con sangre. Así que ahí estaba yo, eran más de las ocho, y estaba de pie sola en la explanada con una gran mancha roja  en mi trasero y unos artísticos puntos rojos bajo el de mis pantalones. Este mensaje es para todas las mujeres que se ofrecieron a ayudarme a ocultar mi condición de mujer:

“A las mujeres que ofrecieron ayudarme a ocultar mi ‘feminidad’, NO ESTOY AVERGONZADA. Sangro cada 28-35 días, es doloroso a veces, me cambia el humor en algunas ocasiones, pero camino hacia la cocina, me sirvo unas galletas de chocolate y me recupero lo suficiente para soportar el infierno que venga por las siguientes 8 horas”, escribió.

“A los hombres que me miraron feo hoy, NO ESTOY AVERGONZADA. Miren mi gran mancha roja en mis pantalones si quieren, miren mi trasero, miren la forma en la que me muevo, vengan a tocarme si se atreven y les demostraré que no estoy avergonzada. Sacaré una toallita y les mostraré cómo funciona, mientras ustedes me enseñan cómo orinar en público (porque claramente a ustedes no les avergüenza)”

A los niños que no les importó, NO SE AVERGÜENCEN. Habrán muchas manchas en los pantalones, en las faldas, en las sábanas, en las almohadas, sillas, mesas, contra la muralla. No susurren la palabra ‘periodo’, no le ofrezcan discretamente a una mujer una toallita o un cambio de ropa. PREGUNTEN si necesitan una, DÍGANLE que tiene una mancha, no la hagan ocultarlo”, concluyó.

12549001_898658053586148_5443362447564916719_n


Reels

Ver Más »
Busca en El Ciudadano