En la bahía de Dugong, en la alejada región de Kimberley, donde se considera el habitad natural de tiburones y cocodrilos marinos que pueden alcanzar hasta los siete metros de largo y pesar una tonelada, ocurrió un hecho curioso con Melissa Brunning (mujer) que aseguro que “intentaba darle de comer a cuatro tiburones” los cuales seguían la embarcación donde ella navegaba.
De esta manera, cuando procedía a alimentar uno de depredadores, que a su vista alcanzaba unos dos metros de largo, le aspiró el índice a la mujer. «Creo que el tiburón estaba tan conmocionado como yo. La única manera de describir lo que pasó es que la presión era inmensa y tuve la impresión de que el tiburón mascaba el dedo hasta el hueso». Declaró Brunning el sábado por la noche al West Australian.
Un compañero, Channel Seven, quien era su acompañante en el Yate, el sábado difundió unas imágenes filmadas con un teléfono celular, donde se puede observar a Brunning gritar cuando es sumergida por el tiburón, antes de ser rápidamente rescatada por el resto de la tripulación del yate y sus amigos.
https://www.youtube.com/watch?v=bmn1LHhR0b0
Luego de estar a salvo y con certeza de que no perdió el dedo, la expedicionaria aprendió la lección y dijo que “el animal tiene culpa” aprendió a «respetar a los animales marinos, a mirarlos con admiración y dejarlos tranquilos».