Ha consolidado una exitosa carrera profesional, pero detrás eso, Naomi Watts tiene una historia que contar, la de su pasado. Contrario a lo que muchos pudieran imaginar, la nominada al Premio Oscar tuvo una infancia marcada por la inestabilidad familiar y diversos sucesos que hoy rememora con nostalgia. Sin embargo, nada de eso le impidió continuar con sus planes de triunfar en lo que más ama. Después de todo, de los duros golpes de la vida aprendió a hacerse fuerte.
En una reciente entrevista, Naomi abrió su corazón para hablar de un fuerte suceso que le cambió la perspectiva por completo cuando apenas era una niña, el fallecimiento de su padre. Frente a esa circunstancia, fue la banda Pink Floyd quien le tendió una mano a la familia, pues su padre era el ingeniero de sonido de la legendaria agrupación. “Cuando él murió, mi papá no tenía dinero ahorrado y supongo que mi mamá tampoco tenía nada. Así que ellos, la banda, fueron muy gentiles… Creo que le dieron a mi madre algunos miles de dólares para poner las cosas en marcha”, recordó la actriz en una entrevista concedida al diario británico The Guardian.
El padre de Watts, Peter, murió a la edad de 31 años por una sobredosis. A lo largo de todo este tiempo los recuerdos prevalecen. En ocasiones, hay circunstancias que logran mover la fibra más sensible, como cuando un fanático de Pink Floyd le mostró una foto de su progenitor. “Tienes que entender, tengo quizá tres fotos de mi padre y quizá un par de recuerdos. Y todas las fotos de él están fuera de foco o él se ve como una pequeña mancha al fondo”, dijo.
De su infancia también tiene presentes otras experiencias, como cuando todo el tiempo su familia se mudaba de casa, situación que la llevó a cambiar de colegio en más de una ocasión. Con ese contexto de vida, las preguntas sobre sí misma comenzaron a surgir. “¿Cómo me incluyo en ese grupo? ¿Cómo puedo ser aceptada? ¿Quién debo ser? ¿Quién quieres que yo sea?”, dijo la actriz durante esa charla.
En este momento de su vida, Naomi disfruta junto a sus hijos, Sasha y Kai, pero de lo que sí está segura es de no querer que ellos pasen por la misma situación que ella: el constante movimiento entre un lugar y otro. “Tengo niños en la escuela… algunos actores educan a sus hijos en casa, pero era importante para Liev (su ex pareja) y para mí que ellos tuvieran relaciones normales con sus amigos”, dijo.