Nicole Kidman actúa de Celeste Wright, una mujer víctima de abusos, en el drama de HBO Big Little Lies. En una reciente entrevista con W Magazine, contó que se sintió «humillada» luego de filmar fuertes escenas de sexo y que incluso quedó con magulladuras y hematomas.
La actriz contó que las escenas fueron tan traumáticas, que luego se quedaba tumbada en el suelo del baño, prácticamente desnuda y con la ropa interior rasgada. Contó que quedó tan afectada que después de las escenas solo quería irse a su casa. Durante el rodaje ponía cara de valentía, pero al llegar a su casa se daba cuenta de lo afectada que realmente había quedado.
La actriz ganadora de un premio de la Academia, admitió que luego de las escenas tuvo que tomar medicamentos para el dolor a causa de las heridas provocadas durante el rodaje, y que luchó con el gran impacto emocional que tuvo para ella participar de la filmación.