Las inundaciones en la estación de tren central de Uppsala, en Suecia, a causa de intensas lluvias que ya marcaron un récord de precipitaciones en el país nórdico, afloraron el sentido del humor de los sueco.
Muchos de los pasajeros y habitantes locales afectados por este fenómeno climático se vieron obligados a recorrer los pasillos con agua hasta las rodillas, mientras otros lo tomaron con humor e incluso se animaron a un chapuzón con improvisados botes inflables.
El diario The Local, reseñado por la cadena RT, informó que los pasajeros debieron cargar con el equipaje pesado en las manos para evitar que se mojaran sus pertenencias, lo cual no fue nada gracioso, según reportaron. Así, numerosos usuarios compartieron en las redes sociales las imágenes tomadas en el lugar.
En Suecia, las tormentas eléctricas que acompañaron las torrenciales lluvias afectaron varios edificios públicos, entre ellos el hospital de Uppsala, y causaron incendios y demoras en los vuelos nacionales en diversas partes del país.
Grupos ambientalistas reclaman al Gobierno que se tomen mayores previsiones ante los desbordamientos que provocan las tormentas que han ocasionado pérdidas cuantiosas. También plantean la necesidad de una mayor planificación urbana que prevea estos fenómenos que son cada vez más frecuentes y en algunas regiones han resultado en víctimas fatales.
Tal fue el caso reciente en Japón, donde las últimas inundaciones causaron 85 fallecidos y por lo menos 45 personas registradas por las autoridades, están desaparecidas.