El voltaje más bajo de Estados Unidos se debe a que Thomas Edison inventó la electricidad de corriente continua (DC) con voltaje de 110.
El rival de Edison, Nikola Tesla, demostró que líneas eléctricas largas transmitían corriente alterna (AC) en forma más eficiente que la DC. Su concepción se impuso, aunque el modelo de 110V de Edison se mantuvo. Y así ha seguido siendo en Estados Unidos, Canadá y parte del Caribe desde entonces.
Para cuando la electrificación se extendió por Europa a principios del siglo XX, las lámparas usaban filmanetos que podía emitir más luz y manejar una carga eléctrica más alta. Así que la compañía Berliner Elektrizitatswerke de Alemania estableció la corriente de 230V como algo estándar.