¿Qué buscan las empresas a la hora de contratar?

Te pusiste tu mejor ropa. Escudriñaste cuidadosamente tu aspecto hasta comprobar que se veía perfecto. Salíste de tu casa con la anticipación suficiente para llegar temprano. Estás nervios@, pero confiad@.

Sin embargo, luego de la entrevista, nunca más te vuelven a llamar.

¡No desesperes! El mercado laboral –como todos los mercados de este sistema- es perverso y, por lo tanto, hay ciertos detalles que tal vez no contemplemos a la hora de presentarnos ante una empresa.

Aquí algunos aspectos a tener en cuenta para que, la próxima vez, ese puesto de trabajo tenga tu nombre y apellido.

Habilidades interpersonales: No todo es currículum en esta vida. Si bien la experiencia siempre es valorada, los reclutadores de Recursos Humanos tienen muy en cuenta que la persona a contratar pueda desenvolverse de la manera adecuada en ese contexto; esto no siempre depende del entrevistado, en este sentido se considera como un valor importante que la persona encaje con el perfil de la empresa.

Por eso se recomienda no mentir en cuestiones personales y de trato, ya que tarde o temprano la incomodidad revelará la verdadera personalidad: “Mentí para entrar a trabajar a una Clínica de Fertilización –cuenta Andrea, de 24 años-. El puesto lo conseguí, pero a los tres meses me echaron, lo cual tenía sentido: yo no tenía nada que ver con el perfil de la empresa. Teníamos que usar tonos claros en la ropa, no nos dejaban ni siquiera pintarnos las uñas y yo quería teñirme el pelo de fucsia. Al final, conseguir ese trabajo solo atrasó mi búsqueda de estabilidad laboral”.

Polivalencia: La versatilidad es una característica codiciada por los departamentos de Recursos Humanos. Que un empleado pueda llevar adelante más de un tipo de tarea, es reconocido como un valor agregado y, también, que pueda ser capaz de adaptarse a más de un contexto. En este sentido, puedes resaltar en la entrevista que así como te gustan los números, por ejemplo, eres un excelente cocinero.

Capacidad de negociación: ¿No te ha parecido un momento especialmente incómodo aquel en donde te preguntan cuál es el sueldo pretendido? Esto no solo responde a una cuestión financiera sino también a evaluar la habilidad negociadora que tenga el próximo empleado. Los profesionales de Recursos Humanos lo toman en cuenta en función a evaluar la relación costo-beneficio que el candidato pueda llegar a establecer en un futuro a favor de la empresa.

Un tip importante a tener en cuenta a la hora de responder, es averiguar antes sobre leyes laborales que estipulen los salarios y tener conocimiento de los tarifarios que rondan alrededor de la tarea específica a desarrollar y del horario establecido por la empresa.