El bullying es un problema global que cada día prende más focos de alerta. En los últimos años, historias de acoso escolar han sacudido al mundo por sus terribles consecuencias. Las víctimas de este problema pueden llegar a considerar suicidarse de 2 a 9 veces más que las que no lo son.
En Estados Unidos, 1 de cada 7 estudiantes es un acosador, o es víctima de uno de ellos. En países como México 6 de cada 10 alumnos sufren bullying escolar.
En este experimento social, un actor llamado Adrian Gee fue a la Universidad de Adelaide en Australia del Sur para molestar a un estudiante que parecía mucho más joven y más pequeño que él.
¿El objetivo? Ver cuántas personas intervenían para ayudar a la víctima.
Los números fueron similares. Alrededor de un 50 por ciento de personas ayudaron a la víctima mientras que el 50% restante actuó como si no hubieran sido testigos de nada.
Si queremos detener la intimidación y el acoso no podemos actuar como si esto no fuera un problema.
Fuente: Upsocl
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