¡Las fotos que ves son verdaderamente espeluznantes! Es una consecuencia de un tratamiento incorrecto que conllevó a que el pequeño Lewis acabara en el hospital con sepsis grave. Su madre, Halle Lions, compartió esta foto en Internet para advertir a otros padres.
Su mensaje alcanzó más de 300 mil «compartido» y, efectivamente, resultó ser muy útil para otras personas. Se trata de la prescripción errónea de los fármacos antiinflamatorios, tales como ibuprofeno o aspirina, cuando está diagnosticada la varicela. Nadie sospechaba el peligro, hasta que Lewis parara en la reanimación con una sepsis grave.
Cuatro especialistas diferentes prescribieron ibuprofeno a Lewis, al darse cuenta de que tenía varicela, siguiendo el tratamiento antiinflamatorio. Acto seguido, el estado de Lewis se agravó drásticamente, y le diagnosticaron la sepsis. Estas ampollas sobre su piel son una reacción al tratamiento con ibuprofeno.
El niño tuvo suerte que los médicos que lo curaban ya habían tropezado antes con casos similares. Resultó que ibuprofeno nunca se prescribe para tratar la varicela, porque intensifica la reacción de la piel a la infección. Así una erupción insignificante se transforma en ampollas enormes y dolorosas.
Afortunadamente, ahora Lewis está bien — 10 meses después del tratamiento de la varicela y grave sepsis sufrida, su piel solo muestra algunas cicatrices casi invisibles. Sin embargo, Halle Lions decidió mostrar una vez más las fotos de su hijo en la Red de redes, porque a la hija de su conocido también le habían diagnosticado varicela.
Esperamos que, a partir de ahora, tú también estarás alerto si notas alguna erupción sospechosa sobre tu piel o la de tu hijo. Antes de automedicarte, ve al hospital más cercano y haz exámenes. ¿Y si es la varicela? Y si, por casualidad, los médicos te prescriben ibuprofeno o aspirina, cuéntales sobre este caso. ¡Simplemente por si acaso!