Todavía quedan personas de buen corazón. Y prueba de ellos es lo que hicieron Johny Bobbit Jr y Kate McClure el uno por el otro.
Kate McClure, de Nueva Jersey, sufrió a principios de mes un incómodo percance: se quedó sin combustible en medio de una carretera en Filadelfia. Era de noche, estaba sola y comenzó a caminar, nerviosa y asustada, rumbo a una estación de servicio que se encontraba bastante lejos.
La única persona cerca era Johnny Bobbitt Jr, un hombre sin hogar que mendigaba con un cartel a la vera del camino. El muchacho se interesó por las cuitas de la muchacha, y al notar su nerviosismo le dijo que regresara al auto, trancara las puertas y aguardara mientras él iba en busca del combustible.
Kate le dijo que no tenía dinero en efectivo y pensaba, pero eso no hizo cambiar de parecer a Johnny. Rato después estaba de regreso con un bidón de gasolina en el que había gastado sus únicos 20 dólares.
La chica pudo volver a poner su auto en marcha y siguió su camino, pero no olvidó a su benefactor. Al otro día regresó a la carretera, buscó a Johnny y le entregó dinero, comida y algo de ropa.
Esta situación se repitió durante varios días, en los que Kate fue conociendo más sobre la situación de desamparo del hombre que, pese a no tener nada, siempre estaba dispuesto a ayudar a otros.
Conmovida, la muchacha lanzó en la web una campaña de recolección de fondos con la intención de mejorar la calidad de vida del solidario vagabundo: el objetivo era costarle el alquiler de un cuarto o apartamento, comprarle un pequeño coche de segunda mano -algo muy barato en EEUU- y ofrecerle algo de dinero para sus necesidades básicas.
El pedido se viralizó en las redes, y en menos de dos semanas reunió 290.000 dólares, una cifra más que suficiente para el objetivo perseguido.