Una playa de Brighton en el Reino Unido fue el escenario de un increíble hecho el pasado domingo. Un testigo del la situación documentó el el momento en que una mujer corre determinadamente en dirección al mar y se lanza sin pensarlo a las frías aguas mientras su perro de raza Border Collie flota a tan solo unos metros de distancia.
Mientras se disponía a rescatar a su su mascota una sorpresiva «pared de agua» la derrumba y la empuja hacia la orilla. El esfuerzo de la mujer fue en vano ya que el can logra alcanzar la orilla por sus propios medios, aprovechando el impulso de otra ola. Obstinada en su actuar la mujer no duda en ayudarlo, lo toma en sus brazos y vuelve a caer ya que la fuerza del mar no le permite mantener el equilibrio.
Los esfuerzos de la mujer no fueron suficientes, ya que la única manera en la que ella y el perro pudieron salir del agua fue con la ayuda de otra persona.
Según señala el sitio en español de RT, el jefe del servicio local de guardacostas, Chris Ingall, advirtió que la mujer tuvo «mucha suerte» de no haber sido arrastrada mar adentro. Las aguas de esa zona aumentan de profundidad de manera muy repentina, por lo cual apenas unos pasos más podrían haber sido fatales.