Hay transformaciones radicales… ¡y la de Zac Efron! Y es que de ser un chico con figura tonificada, el famoso se convirtió en toda una roca de músculos gracias a la rutina de ejercicios y dieta que siguió, todo esto para lograr un cuerpo de Baywatch, película en la que participó.

Pero, ¿a qué sacrificios se sometió el actor de 29 años? Nada más y nada menos que a una rutina estricta de 12 semanas creada por Patrick Murphy, su entrenador, la cual consiste en ejercicios divididos en tres días: en el primero, se trabaja espalda y bíceps usando una rueda abdominal, pesas, poleas, cuerdas gruesas e incluso levantamientos con llantas de crossfit, las cuales suelen pesar más de 13 kilos.

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En el segundo, Zac trabajaba pierna,  haciendo prensa de piernas, sentadillas, salto de cuerda, ejercicios sobre una pelota grande, peso muerto rumano, elevación de talones con sólo una pierna, salto en cuclillas, entre otras más. Y para el tercero, el actor ejercitaba hombros, pecho y brazos realizando lagartijas, press de hombros, pecho, planchas sostenidas o en bosu, y más.

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Y aunque el ejercicio fue parte fundamental para su cambio, el famoso también tuvo que ponerse a una dieta libre de comida chatarra y azúcar, sólo comiendo proteína magra como pollo, cerdo, huevo, pescado o res, carbohidratos integrales provenientes del arroz, avena y quinoa, grasas saludables de las nueces, aguacate, semillas y fibra, comiendo manzanas, moras, peras y verduras.

«Lo más importante que he aprendido en lo que a la dieta se refiere es que hay que alejarse de todo tipo de alimentos procesados y pasarse a lo orgánico. No como alimentos hechos con productos químicos, así que trato de comer sano”, comentó a Men’s Fitness.