Proveedor de chalecos antibalas de Carabineros denuncia “prácticas ilegales” de la institución

Carlos Capurro, gerente comercial de la empresa CLK, que provee a Carabineros de chalecos antibalas y otros implementos, denunció “prácticas ilegales” de la institución en entrevista con la Unidad de Investigación de Radio Bío Bío. Un informe de Contraloría General de la República señala que en las bodegas de la Unidad de Armamento y Municiones (L-5), dependiente de la Dirección de Logística de Carabineros, “están apilados dos mil chalecos antibalas sin usar”.

El empresario reconoce que la institución policial rechazó los elementos de seguridad porque no cumplieron el estándar impuesto, pero explicó que las mediciones de éstas se hacen ‘a mano’ y con carencia de tecnología. Además, plantea que las licitaciones son siempre de carácter privado, lo que a su juicio no entrega la transparencia necesaria al proceso.

Radio Bío Bío dio a conocer el mencionado informe de Contraloría, en donde además se da cuenta de “la pérdida de armas que luego aparecieron en manos de narcotraficantes”.

Carlos Capurro, gerente comercial de la empresa CLK. Foto: Radio Bío Bío

Según la auditoría administrativa, “CLK los tenía virtualmente olvidados y se negaba a retirarlos por mera arbitrariedad, luego que la policía uniformada, previo examen de seguridad, rescindiera el contrato de más de 700 mil dólares anticipadamente. ¿La razón? Los chalecos antibalas no cumplieron con la normativa, de acuerdo a Carabineros”, publica Bío Bío.

Carlos Capurro, gerente comercial la empresa, responde que la situación es “diametralmente distinta” y asegura que “han intentado recuperar los chalecos, pero debido a la excesiva burocracia en Carabineros y el desconocimiento (de dicha institución) de cómo opera el comercio exterior, se han visto imposibilitados de llevar a cabo el retiro”. Denuncia que el valor del producto nunca fue pagado por la policía uniformada.

“Somos proveedores de las Fuerzas Armadas y las policías de Chile desde hace cerca de 35 años”, dice Capurro. Agrega que han realizado muchos reclamos, diciendo que esto “debería ser hecho por licitación pública, porque el riesgo de las licitaciones privadas es que los oficiales a cargo incluyen o excluyen a las empresas que ellos quieren. Al invitar a un número mínimo de participantes, eso se puede convertir en una compra dirigida. Y así, invitar a la empresa favorita y empresas que no se dedican al rubro, que luego no participan. Hemos sido testigos de ello”, denuncia.

“A mucha gente le llama la atención que nosotros como proveedores tengamos conflictos con Carabineros, pero al mismo tiempo les debemos aclarar que no estamos en conflicto con la institución, estamos en conflicto con los pocos oficiales corruptos dentro Carabineros”, señaló a Radio Bío Bío.