El pasado 9 de septiembre trabajadores del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), específicamente personal de terreno del proyecto IPC, realizaron una manifestación en el frontis del edificio institucional ubicado en el Paseo Bulnes en Santiago, esto con el objetivo de denunciar públicamente precarias condiciones laborales y sobrecarga en su trabajo. Junto con ello acusaron una falta de voluntad de la autoridad para reunirse con los funcionarios y allanarse a una solución. Advierten un «sistemático abandono» por parte de la dirección de la entidad.
«Desde hace más de siete meses que estamos trabajando sin la cantidad de gente necesaria, por lo cual la carga diaria de trabajo se ha visto aumentada considerablemente, aumentando el número de licencias por enfermedades laborales y atribuibles a estrés laboral», denuncian en un comunicado los trabajadores.
Detallan que deben realizar sus labores, por ejemplo, «en un ambiente en el cual no existe cableado eléctrico, por ende no tenemos conexión para computadores, lo cual es fundamental para nuestras labores». En ese sentido, aseguran que solo el 40% del equipo cuenta con PC propio, «los cuales deben rotar entre los demás recolectores, lo que hace el trabajo caótico por las mañanas».
A eso agregan que durante este año se han integrado personas de otros proyectos, las cuales -dicen- «están trabajando con contratos que no corresponden a las labores realizadas, tienen diferencias de hasta $100.000 en sus remuneraciones y no cuentan con el bono de locomoción».
Los funcionarios del INE sostienen que tras una reunión del equipo con el director nacional, Guillermo Pattillo, el pasado 9 de agosto le enviaron una carta a esta misma autoridad especificándole las problemáticas, la que -de acuerdo a lo que denuncian- solo fue respondida 6 días después «con un acuse de recibo». Ante esto volvieron a enviar una misiva a Pattillo, incluyendo esta vez un petitorio y solicitando una reunión a más tardar para este lunes 9 de septiembre.
Luego de no obtener «respuestas concretas» por parte de la dirección nacional es que decidieron manifestarse frente a las dependencias en Paseo Bulnes.
Por ahora, aseguran que lo único que han conseguido es «que el cableado que estaba sobre nuestros puestos de trabajo fuera ordenado para la seguridad de nuestros compañeros».
Entre las demandas que aparecen en el petitorio de los funcionarios está un aumento de sueldo de un 20%, la contratación de al menos 8 personas de manera permanente en el corto plazo, disponibilidad en breve de estaciones de trabajo con el equipamiento necesario para desempeñar sus labores, una actualización del Manual de Procedimiento, un instrumento técnico institucional que defina un protocolo de distribución de cargas,la equiparación de los sueldos de los trabajadores que ingresan al llamado ‘levantamiento del índice’ y la actualización de sus contratos, tickets mensuales de alimentación, entrega de indumentaria acorde al clima según la estación del año y la reevaluación del perfil de cargo de los trabajadores.
Acá un video de la manifestación de los funcionarios del INE de la Región Metropolitana.