Desde el histórico barrio Moneda, en la Galería San Ignacio 75, emerge este sitio; marcado por la nostalgia del barrio, la amabilidad y atención de sus orgullosas dueñas, siempre pausadas y opuestas al agitado ritmo de vida del centro de Santiago.
MUG no sólo es una cafetería que expende comida vegana, como varias otras en Santiago, sino que tiene una identidad propia, que parte desde el nombre -referencia al frenético himno de escasos 35 segundos de la agrupación Descendents– logra satisfacer los paladares y bolsillos de todos quienes estén dispuestos a pasar un buen rato en agradable compañía.
«Desde siempre he preparado comida vegana, incluso vendí por Internet a través de un blog y en tocatas. Vimos también la posibilidad de venderla en la librería y disquería Sarri Sarri, pero habría problemas con los inspectores sanitarios”, explica Cynthia Oliveira, su dueña.
El resto resulta bien anecdótico y casi por arte de magia: «Se desocupó un local (en la Galería), hablamos con la dueña junto a mi socia y partner, Lita, y de inmediato empezamos a adecuarlo como nos gustaría que fuera: Un centro de reunión de gente que empatizara con este estilo de vida y de personas dispuestas a probar algo distinto. Al principio lo vimos bastante difícil, sólo estaba en nuestra imaginación, pero finalmente resultó y aquí estamos», recuerda Cynthia.
Además de estar ubicada frente a un emergente local de diseño y a la vuelta de la ya conocida Sarri Sarri Distro, el local -que abre desde las 10 de la mañana hasta las 8 de la noche y los sábados de 10 de la mañana a 4 de la tarde- se convierte en un paso obligado para probar algo barato y rico antes de irse a algún «evento» los días sábado o solo para capear estas tardes de frío o calor envueltos en buena música.
«Tenemos una amplia carta donde todo es 100% vegano, por lo que aquí no sucede lo que en otros lugares, donde hay cosas atractivas a la vista, pero contienen productos de origen animal como queso y leche, y tienes que preocuparte de preguntar lo que contiene cada cosa; finalmente sin poderlo comer», afirma Cynthia.
«Nos preocupamos especialmente de preparar cada cosa nosotras mismas y si no es posible, por ser cosas industrializadas, leemos muy bien las etiquetas: Si desconocemos algún nombre, llamamos para saber de lo que se trata y si contienen algún producto o vitamina de derivación animal”, continúa Oliveira, recalcando la ortodoxia del menú.
Existen diariamente dos opciones de éste, uno más elaborado, para la gente acostumbrada a la comida vegetariana y un menú tradicional -vegano- para la gente que no está acostumbrada. Los valores son de $1.900 con entrada de ensalada, jugo natural y postre y el menú especial a $2.500.
Además de su exquisito menú (recomiendo personalmente el jugo de frutilla natural acompañado de un colorido «Cupcake») el local ofrece buena música, en un espacio de decoración minimalista que resalta la esencia y frescura en medio de los oscuros pasillos de la galería. Aquí es donde comienza lo entretenido: La fusión entre música y comida, que pretende integrar sets acústicos de bandas e intercambios de discos, principalmente los sábados.
«El sábado podemos darle algo de vida a la galería, invitando a la gente a intercambiar discos, conversar de música e incentivar a bandas a realizar sets acústicos, no olvidando probar alguno de nuestros deliciosos platillos», explicando sonriendo.
Poco tiempo pasará para que MUG se convierta en una movida plataforma para el intercambio y enfoque de la cultura apegada al movimiento musical y que además gusta de la buena comida. Una perfecta alternativa para que quienes recorren a diario el céntrico Santiago, y disponen de gustos específicos, encuentren una alternativa para alimentarse y quienes no, puedan conocer y maravillarse con deliciosas y saludables recetas.
Cafetería «MUG», Galería San Ignacio 75, local 23. Abierto de lunes a viernes 10 de la mañana a 8 de la noche y sábados de 10 de la mañana a las 4 de la tarde. Más noticias en su Facebook: MUG
Tomado de Nihilismo Innecesario y levemente editado.
Fotografías por Matías Delacroix