Motivados por conocer las tradiciones azucareras de Cuba turistas de diversas partes del mundo que llegan al destino Jardines del Rey en el litoral norte de la provincia de Ciego de Ávila visitan el museo azucarero Patria o Muerte.
Ubicado en la periferia de la ciudad de Morón, a unos 470 kilómetros al noreste de La Habana, la instalación ofrece la oportunidad de conocer las diferentes etapas por la que ha transitado la industria azucarera en la Isla.
Turistas provenientes de Canadá, Francia, Alemania e Inglaterra y en menor escala de España, Argentina, Chile, Uruguay y México, son atraídos por las locomotoras de vapor marcas Baldwing y Vulcan, fabricadas a principio del pasado siglo, y que aún mantienen perfecto estado de conservación.
Allí también pueden observar una grúa de vapor que trabajó en el Canal de Panamá, un zeppelín del año 1917, un motor de vía (chispita) y una cigüeña (pequeño motor de movimiento manual), además, de tándem, báscula y molinos.
En el área exterior y con un ambiente muy agradable, rodeado de arbustos, se encuentra la réplica de un trapiche (sistema rústico de moler caña) y de una yunta de bueyes, principales artículos empleados para la producción de azúcar en la etapa de la colonia.
En ese mismo entorno los visitantes disfrutan de la actuación del grupo folclórico local Afrocaribe, cuyos integrantes mediante la danza y los movimientos escenifican el trabajo de los negros esclavos, principal fuerza de trabajo de la época.
Concluida la ceremonia degustan de la canchánchara, tradicional bebida cubana, elaborada con miel de abeja, jugo de limón, aguardiente y agua mineral.
Según la museóloga Belkis Arias, también es considerada un cóctel energético y el primer trago cubano muy ingerido por los mambises durante las guerras independentistas de Cuba para mitigar el frio.
Entre las diez áreas disponibles del museo sobresalen la exhibidora de máquinas de herramientas, de historia, la expositiva, la del vasculador y molino y la rústica, ésta al aire libre y donde se encuentra el trapiche y la réplica de la yunta de bueyes, resaltó.
José Ángel Sierra, especialista del Patria o Muerte precisó que lo más llamativo de la excursión es el recorrido de cinco kilómetros a bordo de tres coches abiertos tirados por una locomotora de vapor marca Baldwing, fabricada en 1920, que permite a los turistas relacionarse con el cultivo de la caña de azúcar en Cuba.
El tren los traslada hasta el centro campestre Ranchón Las Palmas, donde el viajante puede degustar guarapo (jugo de la caña de azúcar) y un almuerzo criollo, confeccionado con carbón vegetal, en contacto directo con una agradable vegetación y abundante fauna.
Explicó que en áreas aledañas está ubicado el batey de unos nueve mil habitantes, surgido en la década de los años 20 del pasado siglo, donde vivían los obreros que laboraban en el central en ese entonces.
En los 12 años de creada la institución cultural la han visitado más de 140 mil turistas, por lo que se considera entre las excursiones de mayor demanda en la cayería norte avileña, la cual es promocionada por la Agencias Cubanacán Viajes, Cubatur y Gaviota Tour, señaló Sierra.
Dentro del programa se incluye la estancia en una casona del clásico estilo country californiano en la cual se proyectan videos sobre el proceso de la agroindustria y sus derivados.
También se exponen fotos, documentos, artículos de interés, una breve historia de los cuatro ingenios que aún permanecen en activo en el territorio y los principales productos derivados de la caña que comercializa la empresa cubana Tecnoazúcar.
Construido en 1914 el Patria o Muerte fue el primer central azucarero de la Isla Caribeñaen introducir la mecanización en el corte y alza de la caña y fue precisamente el 20 de diciembre 1962 cuando Ernesto Che Guevara empleó la combinada cañera en ese lugar.
Después del proceso de reordenamiento del sector azucarero en 2002, el ingenio se convirtió en museo para salvaguardar el patrimonio azucarero cubano y mantener vigente las tradiciones históricas y culturales de una de las industrias con más historia en el país caribeño.
Su cercanía al destino turístico Jardines del Rey, lo hace muy asediado por los visitantes que llegan a los cayos Coco y Guillermo, no sólo en busca de sol y playa, sino también, para adentrarse a las interioridades de la hermosa Isla de Cuba.
Por Neisa Mesa del Toro
Tomado de Prensa Latina