Una delegación de alto nivel de la Internacional Progresista se encuentra en Tegucigalpa (Honduras) para apoyar al pueblo hondureño y a su gobierno, dirigido por la presidenta Xiomara Castro, en su lucha contra el colonialismo corporativo.
La delegación, de la que forman parte Andrés Arauz, ex director del Banco Central de Ecuador, María Fernanda Carrascal Rojas, miembro de la Cámara de Representantes de Colombia, Guillaume Long, exministro de Relaciones Exteriores de Ecuador, Ladan Mehranvar, investigador jurídico principal del Columbia Center for Sustainable Investment, entre otros líderes y lideresas políticxs y expertxs en políticas, mantendrá una serie de reuniones en el país con funcionarixs del gobierno, incluida la presidenta Xiomara Castro, del 10 al 13 de noviembre.
Al dar la bienvenida a la delegación, el Viceministro de Relaciones Exteriores de Honduras, Gerardo Torres Zelaya, declaró: «Nos complace dar la bienvenida a la delegación de alto nivel de la Internacional Progresista y su apoyo en la lucha por recuperar nuestra soberanía nacional.»
El Estado de Honduras se enfrenta a enormes demandas judiciales interpuestas por empresas extranjeras por decisiones democráticas tomadas por el pueblo hondureño y sus representantes electos. Una de estas demandas asciende a 10 mil 700 millones de dólares, dos tercios del presupuesto de Honduras previsto para 2023.
Se demanda al pueblo hondureño por su decisión democrática de anular una ley posterior al golpe de Estado de 2013 que permitía la creación de zonas económicas especiales conocidas como «ZEDEs«. Como explicó Gerardo Torres Zelaya: «El pueblo hondureño se resistió al nuevo colonialismo de las ZEDEs. Votaron para recuperar nuestra soberanía tras 12 años de dictadura, y hemos honrado este mandato popular.»
Vendidas a los inversores extranjeros como un paraíso cripto-libertario, estas zonas recibieron autonomía del gobierno nacional creando espacios donde las empresas pueden abusar de los derechos de los trabajadorxs, ignorar los acuerdos internacionales y extraer la riqueza de la nación hacia cuentas bancarias en paraísos fiscales.
El país se enfrenta ahora a un total de diez demandas internacionales de solución de controversias entre inversores y Estados (ISDS, por sus siglas en inglés) presentadas por distintas empresas. Estas demandas se resolverán en el tribunal de arbitraje del Banco Mundial, el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi).
La delegación de la Internacional Progresista se produce mientras aumenta la presión sobre el presidente Joe Biden para que cumpla su postura electoral contra las disposiciones de solución de controversias inversor-Estado (ISDS) en los acuerdos internacionales de comercio e inversión. La semana pasada, 41 legisladores estadounidenses, encabezados por los senadores Elizabeth Warren (demócrata de Massachusetts) y Sheldon Whitehouse (demócrata de Rhode Island) y el representante Steve Cohen (demócrata de Tennessee) enviaron una carta a la representante de Comercio de Estados Unidos, Katherine Tai, y al secretario de Estado, Antony Blinken, donde pedían eliminar la solución de controversias inversor-Estado (ISDS) de los acuerdos de comercio e inversión vigentes en Estados Unidos.
Varsha Gandikota, Co-coordinadora General de la Internacional Progresista y delegada en Honduras, afirmó que Honduras se enfrenta a «uno de los intentos más descarados de colonialismo corporativo del siglo XXI».
Este asalto al pueblo de Honduras se lleva a cabo en la oscuridad de los tribunales internacionales de arbitraje que encierran el poder corporativo. Aunque Honduras se enfrenta a diez casos de este tipo, no es una excepción. La gran mayoría de los casos de resolución de disputas entre inversores y Estados implican a empresas del Norte Global que demandan a países del Sur Global.
Estamos con el pueblo hondureño en su resistencia al colonialismo corporativo y en su insistencia en su soberanía popular.
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El mundo se levanta por Palestina
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Foto: Wire
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